Almería. La niña de 16 meses secuestrada hace ocho días por el joven de 25 años Jonathan Moya González y cuyo cuerpo sin vida fue encontrado el jueves en una balsa de riego, falleció de, al menos, un "golpe en la cabeza", según los primeros datos de la autopsia. La muerte se habría producido entre dos y cinco días antes del hallazgo del cadáver.
El fallecimiento de la menor, hija de la compañera sentimental del autor confeso de los hechos, se produjo, según adelantó Canal Sur, de manera violenta a causa de golpes "múltiples" en la cabeza. El cadáver, sumergido en la balsa de riego, estaba en una bolsa "con piedras" para evitar que permaneciese a flote y dificultar que pudiera ser visto.
Jonathan, declarado persona non grata por las localidades de Abrucena y Fiñana, dijo a la Policía Judicial durante el interrogatorio tras su detención dónde estaba la menor, aunque no facilitó datos sobre cómo y cuándo se produjo su muerte.
De momento no han trascendido datos sobre el testimonio de Raúl R.F., el vecino de Fiñana de 25 años arrestado, y a quien se le atribuye haber dado cobertura al autor confeso de los hechos, de quien es amigo. Ambos están pendientes de pasar a disposición del titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Almería, que mantiene decretado el secreto sobre las actuaciones.
La madre de la bebé interpuso en Gérgal la denuncia por el presunto secuestro a las 20.00 horas del pasado día 20 y relató a los agentes que su pareja sentimental, a la que señaló como Jonathan Moya, se había llevado "todas sus pertenencias" y a su hija de 16 meses tras mantener una "fuerte" discusión. Jonathan estuvo en prisión provisional en junio imputado por la presunta comisión de 12 delitos de estafa que habría cometido haciéndose pasar por agentes de la Policía Nacional.
La familia materna de la niña agradeció ayer la colaboración y el apoyo ciudadano recibido estos días y la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para esclarecer los hechos. Leticia Reyes, tía materna de la niña aseguró ayer que su sobrina Miriam "se ha reunido ya con los inocentes, con todos aquellos que sufren las consecuencias de la maldad del hombre".
Los restos mortales de la niña estaba previsto que fueran trasladados ayer hasta La Palma del Condado (Huelva), localidad natal de la madre y la abuela de la menor, que acompañarían a la comitiva fúnebre en un vehículo puesto a su disposición por la Diputación Provincial tras estar cinco días en un centro de acogida inmediata en el que han recibido apoyo de psicólogos y asistentes sociales de la institución. El funeral está previsto a las 10.00 horas de hoy en la iglesia parroquial.
