Vitoria. La AECC no entiende de recortes y sigue destinando un 15% de su presupuesto a la investigación, el arma más eficaz para, a largo plazo, avanzar en la erradicación de la enfermedad. "Sería lo ideal", asegura esperanzada la psicóloga de prevención del colectivo.

¿En qué se basan las políticas de prevención, al margen de insistir a las mujeres sobre la importancia de realizarse las mamografías?

Intentamos animar a la gente para que prevenga esas actitudes que pueden favorecer la aparición del cáncer de mama. Recomendamos que se practique deporte, que se tenga una dieta variada, que se consuman cinco raciones de frutas y verduras al día y evitar el tabaco y el alcohol en lo posible, principalmente. Y sobre todo, realizarse la mamografía.

Esto es lo fundamental.

Sí, sobre todo para que haya una detección precoz. Porque cuanto antes se detecte el cáncer, mejor van a ir los resultados.

A partir de ahí también hay un trabajo psicológico, porque el cáncer afecta a muchos planos de la vida.

Sí. Por eso, el primer paso que damos en la AECC es informar y concienciar a la población sobre los factores que pueden llegar a producir un cáncer, facilitando la prevención. Una vez diagnosticado, damos cita con la trabajadora social, que detecta los problemas sociales que hay o dónde se puede ayudar. Luego, si fuese necesario, habría una cita con alguno de nuestros psicólogos, para que la enfermedad se pueda afrontar de la mejor manera posible, con todos los apoyos. Siempre queremos dar el mensaje de que estamos para cualquier apoyo. Animamos a que vengan la primera vez, porque igual con ese simple gesto resulta mucho más sencillo seguir adelante.

La lucha contra el cáncer de mama ha avanzado mucho durante los últimos años. ¿En qué fase nos encontramos ahora?

Desde la AECC dedicamos muchos esfuerzos a la investigación, que es básica. Parte de nuestro presupuesto lo dedicamos a ella, para ir intentando mejorar en prevención, actuación y en conseguir erradicar el cáncer, que sería lo ideal.

La investigación es fundamental, pero las instituciones se empeñan en recortar las partidas económicas, sobre todo ahora en crisis.

Sí, eso se está notando, pero nosotros seguimos manteniendo el mismo porcentaje, el 15% de nuestro presupuesto, que viene de instituciones, empresas colaboradoras, socios y donativos. Lo que más se nota ahora es la ayuda de los socios. Las instituciones recortan y ajustan todo lo que pueden y las personas llegan hasta donde llegan. La situación económica es difícil para todos y lo estamos notando. Pero hay que seguir adelante y animamos a toda la gente que nos pueda ayudar con lo mínimo, que para nosotros es suficiente.

Una de cada tres mujeres todavía dice 'no' al 'screening'. ¿Cómo se puede llegar mejor a ellas?

A mí me gusta darle la vuelta a ese dato. Que dos de cada tres hagan la prueba es muchísimo en prevención. Es un logro impresionante porque la gente está muy concienciada, ocho de cada diez mujeres saben lo que es una mamografía. Se está viendo que la mamografía cada vez se ve más como una rutina médica, y eso hace que se puedan detectar más casos, pero también que las muertes se reduzcan. Que te manden hacer una mamografía asusta un poco, aunque intentemos quitar ese miedo.

¿Ha sido positiva la extensión de la prueba a las mujeres de 40 a 49 años con factores de riesgo?

Claro, por supuesto. Se han realizado estudios en los que se ve que en esas edades, en mujeres con factores genéticos, se detectan muchos tumores. Me parece fantástico que se hagan este tipo de avances.

¿A pesar de los falsos positivos que pueden darse?

Sí es verdad que a veces los hay, pero son pocos. En definitiva, compensa.

Dijo el consejero de Sanidad que "es mejor tener un cáncer de mama en Euskadi que en cualquier otro sitio". ¿Comparte este diagnóstico?

No creo que sea positivo tenerlo en ningún sitio, pero no me gustaría entrar en ese debate. Creo que en Osakidetza se están llevando las cosas muy bien, estamos contentos con el contacto que llevamos con ellos y no tenemos ningún problema. Pero no hay que comparar, porque no es mejor tenerlo en ningún sitio.

La campaña de la AECC de este año invita a "sumar esfuerzos". ¿A quién más desean llegar?

Es cierto que nos centramos mucho en el rosa, en las mujeres... Pero también se puede dar algún caso entre los hombres. Con esta campaña, queremos ir todos a una y dar la idea de que cuantos más seamos en esto mucho más lejos vamos a llegar.