MADRID. Desde el Ministerio de Sanidad se asegura que, aunque el Plan no cuente con una dotación presupuestaria específica, la lucha contra el VIH sigue siendo una prioridad y que ninguna de las personas afectadas por VIH dejará de ser atendida o de recibir su tratamiento y aseguran que los recortes en ningún caso afectarán a estos pacientes.
Además, recuerdan que se trata de un grupo "especial" de pacientes para quienes la asistencia hospitalaria es gratuita y a quienes el copago se les aplica de forma especial y "nunca pagarán más de 4,13 euros por fármaco, por muy caro que sea" ni más de 10 euros por las medicinas que hayan quedado fuera de la financiación pública.
Actualmente, se calcula que en el Estado hay 130.000 personas portadoras del VIH, de las que casi el 30 por ciento, unas 40.000, no lo saben.
Esta misma semana la doctora Elena Andradas Aragonés asume el cargo de subdirectora de Promoción de la Salud y Epidemiología del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, un cargo desde el que dirigirá el Plan Nacional sobre el Sida, y se nombrará una subdirección adjunta para reforzar las políticas de prevención de enfermedades, entre ellas del sida.
La doctora llega al cargo después de que hayan arreciado durante las últimas semanas las críticas de numerosas ong y plataformas de lucha contra el sida hacia el Ministerio de Sanidad por la "desatención" en la que, consideran, se encuentra la respuesta ante el VIH y el sida tras la salida de la anterior secretaria del Plan Nacional sobre el Sida.
Según esas plataformas, ese "abandono" ha llevado a cerrar o suspender algunos servicios de prevención y atención a personas con VIH de varias entidades autonómicas o estatales.
En la reunión mantenida esta semana con Andradas, las ONG le han dicho que, si se reduce la prevención, "lo que hoy es barato, el año que viene será mucho más caro para toda la sociedad" y le han advertido de que seguirán siendo "críticas" mientras no reciban más información sobre sus condiciones de trabajo.
Desde Sanidad reiteran que este año se han destinado tres millones de euros (frente a los 4,4 del año anterior) para actividades de prevención del Sida, pese a lo que las sospechas que las asociaciones tienen desde hace tiempo sobre la eliminación del Plan han ido aumentando.
Así, desde la Coordinadora Estatal de VIH-SIDA (CESIDA), su secretario Jorge Garrido, ha dicho a Efe, que la desaparición del Plan "se ha hecho visible a través de los propios técnicos del Plan que han enviado "un e-mail de despedida".
También desde organizaciones internacionales como Amnistía Internacional se ha mostrado preocupación por los "drásticos recortes" del Plan.
Las ONG advierten también de que la decisión de dejar sin tarjeta sanitaria a las personas que están en situación irregular en España agrava el problema ya que quienes son enfermos por VIH "podrían no estar recibiendo medicación".
El vicepresidente de la Sociedad Española Interdisciplinaria del Sida (Seisida), Juan Carlos López, cree que los recortes "echarán por tierra" el trabajo de más de treinta años en la prevención, información y tratamiento de las personas con VIH.
Los recortes sanitarios, ha dicho, harán que el VIH sufra "las mismas consecuencias que el resto de enfermedades en cuanto a pacientes y medicamentos extrahospitalarios".
También desde Cesida consideran que el notable avance experimentado por España en medicamentos y antirretrovirales para el VIH puede verse afectado por los ajustes.
En este sentido, Garrido insiste en que, gracias a los fármacos, los pacientes de Sida pueden tener "una calidad de vida igual a la de otras personas".
Desde las distintas asociaciones también se insiste en la importancia que tienen las campañas de prevención que formaban parte del Plan y recuerdan que existen prácticas de riesgo que están más ligadas a determinados colectivos, y que hay un repunte de infecciones en los hombres que practican sexo con otros hombres.
Este problema, alertan, se agrava si estos hombres practican otro tipo de relaciones porque están transmitiendo el virus a otro colectivo, por lo que insisten en la necesidad de que se elaboren campañas informativas.
El escritor, coleccionista de arte y fundador de ArtAids, Han Nefkens, ha contado a Efe que la situación del VIH "ha cambiado mucho en los últimos veinticinco años", ya que hacia 1987 existía un único medicamento que "había que tomar cada cuatro horas y que provocaba todo tipo de efectos secundarios".
Se estima que "el treinta por ciento de la población española está infectada de VIH sin saberlo", asegura, por lo que considera que no invertir en prevención es "muy tonto", ya que un enfermo de Sida cuesta al Estado "unos 8.000 euros anuales", lo que supone un enorme gasto.
Desde el ámbito político, Equo se ha sumado a las advertencias sobre la "suspensión" del Plan que, dice, está provocando retrocesos en la estrategia contra la pandemia mientras que CiU ha presentado una Proposición no de Ley en la que reclama la aprobación de un nuevo Plan Multisectorial frente a la infección por VIH 2013-2017, con su correspondiente dotación presupuestaria.