Vitoria. Vitoria es, a día de hoy, una ciudad más segura que el año pasado. Para ser más concretos, un 11,7% más libre de delincuencia. Tal y como explicó ayer la concejala de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, la estadística ofrecida ayer es global, ya que no sólo hace referencia a las actuaciones de la Policía Local, sino a la suma de las de la Guardia Urbana y la Ertzaintza. En conjunto, el volumen de delitos y faltas en la capital alavesa entre los meses de enero y abril ha pasado de 5.783 en 2011 a 5.105 en 2012.
Uno de los capítulos en los que se ha hecho más patente la reducción de la actividad criminal ha sido en la de los robos. Los delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico descendieron de 1.836 entre enero y abril de 2011 a 1.414 en el mismo periodo de tiempo en 2012. El número de faltas por este mismo motivo ha caído de 2.552 el año pasado a 2.172 en el actual.
Uno de los elementos que han entrado recientemente en juego dentro del panorama de la Seguridad Ciudadana de Vitoria ha sido el Grupo de Prevención y Apoyo (GPA) de la Policía Local, que acaba de cumplir un mes de vida. Ayer, para realizar un pequeño balance de las actividades llevadas a cabo durante este tiempo, Castellanos explicó que el grupo ha protagonizado 404 actuaciones. Labores de vigilancia todas ellas que no implican intervenciones contra delincuentes, sino control de las áreas adjudicadas y de aquellas otras en las que los vecinos han solicitado mayor supervisión policial.
La portavoz municipal precisó que la labor del GPA se ha desarrollado en "todos los barrios de la ciudad" y no sólo los de mayor riesgo de conflictividad como en un principio se sugirió, si bien han prestado especial atención a cinco zonas específicas: Coronación, Ensanche, Desamparadas, Casco Viejo y Zaramaga. La intervención más habitual de esta unidad - que "no es ni especial ni de élite", según quiso dejar claro Castellanos-, ha sido la vigilancia de parques y plazas públicas.
plazas y parques El 84% del total de la vigilancia de parques se ha centrado en San Martín y en el parque del Norte. Paralelamente, el 75% del tiempo dedicado a la supervisión de plazas se ha dedicado a Aldabe, Coronación, Santa Bárbara, Santo Domingo y el entorno de la estación de autobuses. Aunque ayer no se aportaron datos concretos de detenciones practicadas por este grupo, la edil avanzó que su mera presencia "evita la comisión de delitos y faltas". "Con la presencia de la Policía Local en todos estos puntos estamos consiguiendo que se transformen en espacios de normalidad, que es lo que queremos conseguir con este grupo", añadió.
"Pueden realizar intervenciones concretas en situaciones de riesgo específico, como desalojos, o cacheos a personas sospechosas de portar armas. Además, gracias a este grupo hemos podido reforzar, las 24 horas del día, la presencia de la Policía Local en las calles con diferente intensidad en función del momento de la jornada y de las necesidades", informó la titular municipal de Seguridad Ciudadana. Además de estar presente durante las mañanas, los integrantes del GPA se dejan ver más aún todas las tardes a partir de las 18.00 horas y llegan al máximo de su refuerzo durante las noches de los fines de semana.
salidas de las discotecas El Grupo de Prevención y Apoyo de la Policía Local de Vitoria lleva algún tiempo vigilando la salida de las discotecas de la ciudad durante los fines de semana en horarios de mañana. Lo que persiguen estos operativos, demandados por los propios ciudadanos que residen en las inmediaciones de estos locales de hostelería, es, tal y como puntualizó ayer Castellanos, "evitar que se produzcan peleas, gamberrismo y los robos con intimidación".
En colaboración con la Ertzaintza, el GPA realiza controles de seguridad preventiva todos los fines de semana en el área del Casco Viejo con el fin de atajar la comisión de robos con violencia. Igualmente de forma conjunta con la Policía autonómica, la unidad lleva a cabo de forma regular en los barrios de Salburua y Zabalgana para frenar la oleada de robos en el interior de vehículos que el año pasado azotó la capital alavesa. Los agentes no sólo vigilan las calles, sino que también prestan atención a las entradas de los garajes comunitarios, ya que el modus operandi de los ladrones incluía el acceso a estos espacios resguardados de la vista para poder desvalijar varios vehículos de una sola vez.
La edil quiso recalcar que el grupo no sólo actúa bajo las directrices que señalan los mandos de la Policía Local, sino también a petición de los vecinos que sienten que en sus barrios existe inseguridad.
Esta forma de actuar, "bajo demanda" puede representar un adelanto del nuevo modelo de Policía Local que el equipo de gobierno local desea implantar en Vitoria de forma consensuada con el resto de fuerzas políticas, la propia plantilla de Agirrelanda y, sobre todo, con los vecinos de la capital alavesa. Hasta el año que viene, el Ayuntamiento está abierto a cuantas propuestas ciudadanas lleguen en este sentido para mejorar el trabajo de la Guardia Urbana y establecer nuevas metodologías de trabajo. Castellanos ha señalado en este sentido que apuesta por la Policía de cercanía y que, fundamentalmente, patrulle a pie.