"Las compañías aéreas se llevan la palma de las reclamaciones"

¿Es frecuente que los ciudadanos vascos demanden a las grandes compañías o lo suelen dejar pasar?

Por suerte cada vez hay más, pero todavía siguen siendo pocos. Quizás por las pequeñas cuantías, que normalmente son las que se suelen reclamar, y por el desconocimiento y el miedo que parece que da meterse en un procedimiento judicial, mucha gente lo deja pasar, aunque no por falta de ganas, sino por esa serie de circunstancias.

¿A qué grandes empresas demandan más los consumidores vascos?

A las compañías aéreas. No podemos hablar de una en concreto, porque tenemos demandas contra todas. Es el ámbito en el que más reclamaciones hay con muchísima diferencia. Luego también están las entidades bancarias y las empresas de telefonía, pero las que se llevan la palma son las compañías aéreas.

¿Qué porcentaje de las demandas acaparan las compañías aéreas?

Un 90%. Lo que pasa es que contra el resto de empresas suelen ser cantidades muy pequeñas. En el caso de las entidades financieras, por ejemplo, suelen ser cuantías muy pequeñas y la gente al final no quiere ir más allá por esos inconvenientes que cree que le va a suponer el hecho de reclamar, con lo cual se queda mucha gente por el camino y es muy poca la que reclama.

¿Cuáles son los principales motivos de reclamación contra las compañías aéreas?

Cancelaciones, retrasos, problemas con el equipaje, pérdidas, retrasos de la entrega y overbooking.

¿Conocen los ciudadanos qué derechos tienen en estos casos?

La mayoría no saben que tienen derecho a una indemnización. Las compañías tienen la obligación de informar a los pasajeros de los derechos que tienen cuando se produce una cancelación, un retraso o una pérdida de maletas, pero aun así los ciudadanos no son conscientes de sus derechos y muchas veces se conforman con la respuesta que les da la compañía de que no son responsables por lo que sea y no hacen nada. Hay que decirle a la gente que lo consulte con una asociación de consumidores y que se informe de si tiene alguna posibilidad. Si la compañía no está cumpliendo con el contrato que hemos suscrito, tendrá que responder.

¿Cuál es la mayor indemnización que han conseguido?

Hay que partir de la base de que esto no es Estados Unidos. Aquí no hay grandes indemnizaciones ni las indemnizaciones ejemplarizantes para las empresas, que al final es un castigo por haber actuado mal. Aquí es muy raro ver, por ejemplo, una indemnización por daños morales. El único ámbito en el que esto se da es en el transporte aéreo porque tenemos un reglamento de ámbito europeo y ahí sí se establece una indemnización automática, pero en el resto de actividades es muy difícil que los jueces concedan una cantidad por daños morales y si la conceden, va a ser mínima.

¿De qué cantidades estaríamos hablando en estos casos?

Estamos hablando de indemnizaciones que pueden ir, dependiendo de cuál sea el problema, desde los 250 hasta los 1.000 euros. Más o menos esa es la horquilla de las indemnizaciones en el tema del transporte aéreo. En el resto de ámbitos indemnización como tal no existe. Lo único que tendríamos sería la indemnización de daños y perjuicios que se hayan podido causar y que tendríamos que probar.

¿Cuántas denuncias a grandes empresas interpusieron en 2011?

Calculo que habremos presentado alrededor de 100 demandas en general, de las cuales 85 serían de compañías aéreas. Las de compañías aéreas se han ganado todas y del resto, la mayoría también. La verdad es que estamos muy contentos. El balance es muy positivo.

¿Qué tiene que hacer un ciudadano que quiera reclamar?

Nosotros primero miraremos el caso para ver si es viable o no y si entendemos que es viable y la persona quiere continuar con nosotros, tiene que asociarse.

En estas 'batallas' de David contra Goliat ¿es la Justicia igual para todos o suele ganar quien más dinero y mejores abogados tiene?

Para nada y el ejemplo lo tenemos con el tema de las compañías aéreas. Como he dicho antes, se ganan casi el cien por cien de los juicios. Si eso fuera así, no se ganarían. Al final es la leyenda que está en la calle, pero no tiene nada que ver. Los juicios se ganan cuando se tiene razón y cuando te la dan, porque muchas veces tienes razón y no te la dan, pero eso de mitificar a las grandes empresas y pensar que no tenemos nada que hacer no es así.

¿Qué motiva las reclamaciones contra las entidades bancarias?

Estarían, por un lado, los problemas de más importe, como el tema de las participaciones preferentes, los famosos contratos swap, la cláusula suelo y, por otro lado, están los de menor cuantía, como el cobro de comisiones.