Logroño. Ante periodistas de las dos comunidades implicadas en este conflicto sanitario, La Rioja y País Vasco, Garrido ha llegado "tranquilo", con una mochila a la parte trasera de la conocida Concha del Espolón -situada frente a los edificios del Gobierno riojano en Logroño-, acompañado de tres vecinos de su pueblo, que le han ayudado a instalarse para comenzar su acto de protesta.
También acompañará a Rubén Garrido, los días que "haga falta", una pancarta en la que puede leerse "Osakidetza-Rioja Salud. Con la salud no se juega, los pacientes no somos moneda de cambio. Solución ya!!".
Sentado en el banco, que ocupará hasta que este conflicto sanitario se solucione, Garrido se ha mostrado convencido de que el presidente riojano, Pedro Sanz, "recapacitará" y que el Gobierno vasco hará un mayor esfuerzo para ayudar a La Rioja en la asistencia sanitaria de los pacientes vascos de municipios limítrofes con esta comunidad autónoma.
"(A Pedro Sanz) Le honrará que dé un paso atrás", ha afirmado el alcalde del PP de Oyón, quien espera que esta huelga de hambre, que inicia con bebidas isotónicas en su mochila y con un libro titulado "Confianza total", va a "terminar con el calvario" que supone para los vecinos de La Rioja Alavesa no ser atendidos en los centros de salud de La Rioja, como ocurría hasta el pasado mes de septiembre.