Barcelona. Los profesionales sanitarios del Institut Català de la Salut (ICS) tendrán que asumir nuevos recortes salariales para que la entidad pueda cumplir la reducción presupuestaria prevista para este año. En concreto, y según informaron fuentes sindicales, la propuesta del ICS consiste en reducir el importe equivalente al 50% del complemento de destino de la nómina de los profesionales sanitarios, así como aplazar hasta el año próximo el pago de otros conceptos salariales. De esta forma, el ICS descontará de la paga extra de Navidad de sus trabajadores el importe equivalente al 50% del complemento de destino de los meses de octubre, noviembre y diciembre, un complemento presente en las nóminas de todos los grupos de la escala salarial.
Con esta medida, tienen previsto ahorrar 25 millones de euros de los 45 que se quieren reducir en gastos de personal. En cuanto a los 20 millones restantes, se conseguirían aplazando el pago del complemento por carrera universitaria de diciembre de 2011 a enero de 2012 y postergando el pago de las guardias y los festivos intersemanales de 30 a 60 días vista.
Estas medidas fueron detalladas ante los sindicatos en una reunión de la Mesa Sectorial de Negociación de Sanidad, en la que se planteó como se planea ejecutar la reducción de salario que se conoció la semana pasada para ahorrar 45 millones de euros, de los 77 que debe ahorrar en total hasta final de año para cumplir la reducción del 10% del presupuesto prevista.
Según un comunicado del ICS, las medidas propuestas son de carácter temporal y se aplicarán sólo durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2011. Sin embargo, los sindicatos consideran que los profesionales sanitarios no deben cargar con la responsabilidad de un déficit que no han provocado.
"En estos momentos, el pacto es muy difícil porque los trabajadores no tenemos ningún compromiso de que nos retornarán este dinero, ni de que no volverán a bajar los salarios el año que viene", explicó el secretario de Salud de UGT, Juan Cobacho.
La coordinadora de SATSE, María Puertas, calificó la propuesta de "brindis al sol", mientras que Metges de Catalunya advirtió de que la sanidad catalana ya está bajo mínimos y que los médicos no pueden asumir esta sobrecarga.
En términos similares se expresaba antes de que empezara la reunión el presidente del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona, Miquel Vilardell, quien explicó que algunos profesionales médicos de la sanidad pública han visto reducir su salario hasta el 20% y ha pedido que las medidas que se tomen sean "consensuadas" con el personal y que sean "reversibles".