vitoria. Menos papel y gestiones cada vez más sencillas. Este es el propósito de muchos de los avances tecnológicos que hoy aceptamos con naturalidad, como las tarjetas de crédito o la banca on line, y que poco a poco se están extendiendo a otros ámbitos de la vida, por ejemplo, el sanitario.

Dentro de unos meses un enfermo crónico no tendrá que ir cada mes al médico a por una receta y los pacientes no deberán acordarse de presentar ningún papel en la farmacia gracias a la receta electrónica. Bastará con la tarjeta sanitaria.

Este proyecto, que según los farmacéuticos se prevé implantar a lo largo del segundo semestre del año que viene y a principios de 2013, permitirá un servicio "de calidad" y un uso "eficiente y sostenible de recursos". -Anteriormente, la presidenta del Colegio de Farmacia del País Vasco, Virginia Cortina, aseguró que el servicio se implantaría en todas las farmacias vascas para 2012-.

El presidente del colegio guipuzcoano, Ángel Garay, explica que "el concepto de receta electrónica abarca el proceso clínico de prescripción, control y dispensación de medicamentos y productos sanitarios, así como todo el proceso administrativo para la facturación de recetas dispensadas con cargo al Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco".

adiós al papel Esto significa que el papel irá desapareciendo paulatinamente y que, una vez puesto en marcha el nuevo método, el paciente, después de acudir al médico, podrá ir a cualquier farmacia y recoger con su tarjeta sanitaria su medicación. Esto permitirá además que, por ejemplo, los enfermos crónicos se ahorren visitas al centro de salud cada vez que necesiten su medicamento. "Estas funcionalidades se traducen en un sistema de receta íntegra y optimiza los procesos de prescripción y dispensación, siendo así el uso de las medicinas más seguro y eficiente y habiendo una mayor comunicación entre los profesionales sanitarios", asegura Garay.

La primera parte del calendario se completará a principios de septiembre, cuando se cierre la definición "del modelo funcional" y los colegios farmacéuticos vascos firmen el acuerdo de colaboración que regula el proyecto de receta electrónica. "Hasta abril de 2012, que es la fecha de arranque del piloto, se desarrollarán las aplicaciones necesarias para el correcto funcionamiento de la iniciativa", apunta el farmacéutico.

Según detalló el consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, en enero de este año, la implantación de este proyecto es "notablemente compleja". En este sentido, ya recordó que su departamento aportará dos millones de euros al Consejo de Farmacéuticos de Euskadi para que la red de oficinas de farmacia "adecue su tecnología al nuevo sistema".

La advertencia sobre la complejidad de la extensión de la receta electrónica no es baladí. Así, el departamento de Bengoa acumulará un retraso de varios años en la extensión del sistema.

En palabras de Ángel Garay, la principal diferencia entre el sistema actual y el de la receta electrónica es que se pasa de un método que prima el papel a otro electrónico. "Para el paciente, conllevará un cambio de mentalidad en el proceso de generación y recogida de recetas: deberá utilizar obligatoriamente la tarjeta sanitaria, tendrá menos visitas médicas debido a la activación automática de la medicación de pacientes crónicos, etc...". Pero la receta electrónica también acarreará mejoras al colectivo farmacéutico. "Todos los profesionales sanitarios de la cadena, a través de la tarjeta sanitaria del paciente, tendrán acceso a la medicación, así como a su historial farmacoterapéutico, favoreciendo la gestión de la enfermedad y la asistencia del paciente", afirma.

"Una mejor gestión" El presidente del colegio también destaca que se logrará una "mejor gestión", que habrá "menos incidencias en la dispensación", que el farmacéutico "tendrá un mejor conocimiento del enfermo y de su medicación" y que podrá realizar una "atención farmacéutica más especializada".

En estos momentos -añade-, "la cadena prescripción, dispensación y facturación de recetas conlleva mucha burocracia para la oficina de farmacia".

Confían en que la receta electrónica "mejore" este proceso, a pesar de que "queda mucho recorrido por hacer y posibles mejoras que implantar". Asimismo, el presidente de los farmacéuticos guipuzcoanos espera que este sistema "facilite la gestión farmacéutica", aunque considera que "se deberían tomar medidas que potencien la actividad profesional del farmacéutico, ajustadas a su perfil y capacitación profesional".