vitoria. Unos vienen y otros se van. La 'Operación Retorno' de mediados de mes supuso el fin de las vacaciones de muchos veraneantes que, poco a poco, se irán acostumbrando de nuevo a la rutina de una capital desierta estas fechas. Y para que la vuelta al cole o las vacaciones que todavía quedan por disfrutar en la ciudad sean más amenas, Álava está demostrando poder ofrecer una alternativa ideal para pasear o dar una vuelta en bicicleta en familia.
Así lo señalan, al menos, los contadores instalados en distintas rutas verdes del territorio. Y es que, sólo el mes pasado 46.544 personas pasearon por los itinerarios del Nervión, el Vasco-Navarro o el embalse de Ullibarri Gamboa. La cifra asciende hasta 87.878 si se atiende a los dos últimos meses.
Y eso que la climatología no respondió a las expectativas de este tiempo. A pesar de ello, en épocas en las que el bolsillo no permite grandes alardes estivales, esta alternativa se está demostrando como una de las más apetecibles para combinar con los días de escapada a puntos más turísticos. Un total de 420 kilómetros de sendas divididos en diez rutas a las que se sumarán otras cuatro en no demasiado tiempo. Y es que, en la actualidad, ya se trabaja en la habilitación de 320 kilómetros y el estudio de otros 400 que llevarán a Álava a sumar más de un millar de kilómetros sostenibles.
Un conjunto que goza de un futuro halagüeño a tenor del exitoso presente. Así lo determinan los tres contadores de personas y bicicletas que tiene instalados la Diputación en tres de estas vías verdes desde mediados del mes de junio, que han sumado 87.878 personas en estos días. El itinerario que ha gozado de más éxito ha sido el que sigue la antigua ruta del tren Vasco-Navarro. La proximidad a la capital alavesa y el buen estado del recorrido ha seducido a 38.449 personas en este periodo de tiempo. De hecho, sólo el mes pasado 21.451 usuarios se decidieron a acercarse hasta este paseo. Un recorrido de alrededor de 60 kilómetros que ha tenido una acogida especialmente buena entre los ciclistas que ven en la ruta del trenico una estupenda opción para desplazarse desde la capital. De hecho, 26.982 aficionados del pedal escogieron este punto para pasear por los 11.467 peatones.
Una tónica que no se repitió de igual forma en la ruta del Parque del Nervión. Allí el número de peatones que accedió a este recorrido quintuplicó al de ciclistas. Y es que por algo se le llama la ruta del colesterol. Hasta 23.751 paseantes decidieron combatir o prevenir esta enfermedad dándose una vuelta por las cercanías del barrio de Gardea, mientras que sólo 4.593 optaron por la bicicleta. Un total de 28.344 usuarios, de los que 14.453 acudieron en julio.
entre playas y robles Y quizás por su lejanía y porque la climatología tampoco ha querido acompañar este verano a los alaveses, el punto que menos asistencia ha tenido de entre los controlados ha sido el del embalse de Ullibarri Gamboa, a pesar de que este itinerario cuenta con el encanto de tener muy cerca el pantano. Un recorrido de 45 kilómetros que han visitado 21.085 personas desde mediados de junio, en su mayoría viandantes. Y es que, casi 24.000 peatones se han animado a completar alguno de los dos circuitos divididos en 13 y 33 kilómetros disfrutando de las playas, pasarelas flotantes y bosques de robles. Aunque en el último mes no se hayan necesitado demasiado la sombra, ni las playas artificiales. Quizás por ello, 4.593 ciclistas decidieron optar por este medio para disfrutar de este bello paisaje.
Distintas opciones para un mismo disfrute. Y es que el espíritu de sostenibilidad que se intenta que cale en la sociedad actual va dando poco a poco sus frutos. Los que ya han comprobado los beneficios de aficionarse a las rutas verdes y los recursos que tiene el territorio para hacerlo han repetido. Porque muchas veces no hace falta ir demasiado lejos para disfrutar de un bello entorno, un paseo tranquilo y un rato de asueto en medio de la naturaleza.