vitoria. Ni rastro de replanteamiento de ningún tipo. El consejero del Sanidad, Rafael Bengoa, defendió ayer en el Pleno del Parlamento Vasco el incremento de la cuantía de los incentivos a los directivos de Osakidetza ya que, a su juicio, este colectivo ha perdido en los últimos años poder adquisitivo como el resto de trabajadores. Argumentó, además, que de no ser por las primas económicas "no tendríamos directivos en el sector salud", porque "es más interesante ser médico o enfermera", ya que "ganan más".

El titular de Sanidad tuvo que comparecer en el Pleno de control al Gobierno para responder a sendas preguntas efectuadas por UpyD y por EA, a raíz de la información que daba cuenta de que los 125 altos cargos de Osakidetza ingresaron en su nómina del mes de mayo casi un millón de euros en total, en concepto por los incentivos variables según los objetivos cumplidos en 2010. Dicha cantidad (947.499 euros), es un 24% superior a lo inicialmente presupuestado para ese año. La cuantía media obtenida por cada uno de los cargos se ha incrementado en un 41%, estableciéndose en 7.579 euros para cada cargo.

Lejos de negar los datos o de atemperar los alterados ánimos de la plantilla de Osakidetza, cuyos sindicatos han denunciado la medida en una época en la que se han recortado los salarios de los trabajadores y se ha metido tijera en las inversiones, Bengoa defendió la validez de los incrementos de los incentivos adicionales a los sueldos de los altos cargos. Asimismo, reivindicó la "política de complementos en función de la productividad. Creo que esto es sano en una empresa pública de hoy en día", manifestó.

A la pregunta del parlamentario de UpyD, Gorka Maneiro, de si le parecía razonable y justo dicho incremento mientras se baja el sueldo de los trabajadores, el consejero explicó que el colectivo de directivos de Osakidetza tienen congelado el sueldo, a diferencia del personal. También señaló que la reducción salarial de 5% de media aplicada desde hace un año en todos los trabajadores de las administraciones públicas afectó a estos cargos.

Buena parte de su argumentación aludió a las tablas retributivas de los trabajadores de Osakidetza, según las cuales casi un millar de de médicos y enfermeras tienen un sueldo superior al del director general de Osakidetza. "A otros 5.590 facultativoss, 83 MIR, 292 enfermeras, 15 auxiliares de enfermería y 304 no sanitarios tuvieron retribuciones anuales entre los 45.000 y los 90.000 euros, que es el tramo en el que se sitúan ahora los directivos de Osakidetza con estos complementos. Por tanto -aseveró-, no estamos hablando de grandes banqueros forrándose".

Al requerimiento que realizó el parlamentario de EA Juanjo Agirrezabala para que estos incentivos desaparezcan, el titular de Sanidad señaló que en ese caso "no tendríamos directivos". Insistió en que médicos y enfermeras "ganan más" y tienen "muchos menos dolores de cabeza" si se quedan en sus puestos que "si vienen de directivos". "Hoy, repito, si no aplicamos el complemento, gana más un facultativo que se queda de médico de atención primaria que el jefe de toda la comarca". A su juicio, el sistema de incentivar a los altos directivos "nos parece absolutamente objetivo, explícito y absolutamente transparente".

Bengoa echó la vista atrás para asegurar que los incentivos arrancaron en 2007, con el anterior gobierno, y se siguieron aplicando aun en "crisis". Según dijo, "la crisis económica empezó a finales del 2008; se negó, pero empezó en 2008". La diferencia entre entonces y ahora estriba únicamente en que con el gobierno del PNV era "un importe fijo" y ahora se otorga "en función de los resultados".