laguardia. La añada que nació de la vendimia de 2010 es excelente. Así lo ha decidido el órgano que se encarga de velar y gestionar la calidad de los vinos comercializados con etiqueta Rioja -entre los que están los manufacturados en Rioja Alavesa-, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja. Tras el análisis y cata al que se han sometido las más de cuatro mil muestras representativas de los 284,29 millones de litros de vino elaborados de esta cosecha, la valoración es la más alta. Así se confirman las grandes expectativas que había despertado la alta calidad de la uva recolectada durante la vendimia y posterior proceso de elaboración de los caldos, en el sentido de que esta cosecha pudiera convertirse en una de las históricas del ámbito.
Las previsiones finalmente dieron en el clavo. Las claves de la bondad de los caldos alaveses -y los de todo el ámbito Rioja- obedecen a una climatología muy favorable, al excelente estado vegetativo y sanitario del viñedo hasta el final del ciclo, y a los rendimientos de producción muy moderados. En la última década solamente habían recibido la calificación Excelente las cosechas 2001, 2004 y 2005, siendo consideradas como Muy Buena las cuatro últimas.
Sea como fuere, lo cierto es que durante el pasado mes de noviembre comenzó el proceso de calificación de la cosecha 2010. Todo se basa en un programa de recogida de muestras en todas las bodegas elaboradoras por parte de los técnicos del Consejo Regulador. Las muestras deben ser representativas de partidas no superiores a 100.000 litros. Cada una de ella es analizada en el laboratorio de una de las tres estaciones enológicas de la DOC y valorada por un comité de cata integrado por tres profesionales, que forman parte del panel de cata externo con que cuenta el Consejo Regulador y al que pertenecen más de un centenar de expertos.
El procedimiento para la valoración organoléptica está debidamente reglado, garantizándose la confidencialidad y anonimato de las muestras catadas.
Las 4.008 muestras presentadas a calificación fueron sometidas hasta el 31 de marzo a este riguroso control analítico y de cata. Finalmente fueron calificados 255 millones litros (14,49 de blanco, 13,56 de rosado y 227,03 de tinto), así como 5,92 millones de litros que constituyen el stock cualitativo. Se rechazaron por descalificación analítica o sensorial 44 muestras (1,56 millones de litros), un porcentaje pequeño que, dado el rigor que se aplica en los criterios de calificación, es claramente indicativo de la calidad media de la cosecha. El resto de vinos elaborados, hasta el total de 277,91 millones de litros presentados a la calificación, no ha sido calificado por corresponder a excesos de rendimiento en la producción.
Producción en Rioja Alavesa En Rioja Alavesa se han producido cerca de 66 millones de litros de vino, de los que alrededor de 48 millones están en fase de crianza. Ése es el rendimiento total de las 13.143 hectáreas de viñedos de la subdenominación, que produjeron un total de 71 millones de uvas tintas (con un rendimiento medio de 5.814 kilos por hectárea) y 8 millones de kilos de uvas blancas, cuyo rendimiento medio fue de 8.496 kilos.
Estos datos se completan con otros que auguran la recuperación de las ventas de los caldos de calidad producidos en la denominación de Origen Calificada Rioja. De hecho, según la citada institución, el incremento de ventas de los caldos durante 2010, en un contexto de descenso del consumo de vino, ha permitido a la DOC ganar cuota de mercado respecto al resto de los vinos y reforzar su liderazgo en todos los canales de venta y zonas del país. Así lo confirma el estudio sobre la evolución del mercado de vinos durante 2010 realizado por la consultora Nielsen, que destaca la alta participación de más del 70% de las ventas de los vinos con crianza que acaparan los vinos del ámbito Rioja, convertidos en el referente de los vinos de calidad para los consumidores nacionales.
En este contexto, los caldos de la DOC ganaron en 2010 cuota de mercado, manteniendo su posición de liderazgo en todos los tipos de establecimientos de alimentación y hostelería gracias al incremento de sus ventas en un 10,7%, lo que le permitió alcanzar unas ventas totales en nuestro país de 181 millones de litros.