bangkok. Al menos 120 personas murieron a causa del seísmo que sacudió el jueves la región del noreste de Birmania (Myanmar) colindante con Tailandia, de difícil acceso y controlada, en parte, por los ejércitos del narcotráfico, según informaron fuentes médicas de Cruz Roja en el país asiático a la revista estadounidense Time.
Los medios oficiales birmanos mantuvieron la cifra de muertos en 77 y los heridos en 111, pero es de esperar que el balance de las autoridades aumente en las próximas horas conforme los servicios de rescate vayan accediendo al estado de Shan, la zona más afectada por el seísmo, que se encuentra en el corazón del llamado Triángulo de Oro (la frontera con Laos y Tailandia).
El epicentro del terremoto fue localizado en el estado de Shan. La fuerte sacudida causada por el seísmo, que según el Servicio Geológico de Estados Unidos fue de 6,8 grados en la escala abierta de Richter, sorprendió de noche a los habitantes de esta región y también a los de las localidades del extremo norte de la vecina Tailandia.
La mayor parte de las muertes se produjeron en pequeños pueblos que están diseminados por las montañas y cuyo control se disputan las tropas gubernamentales birmanas y las organizaciones étnicas rebeldes ligadas al negocio de la droga. En la aldea de Ja Kuni, a unos 80 kilómetros al este de Tachilek, la mayor ciudad de la región birmana afectada por el terremoto, unas 20 personas murieron sepultadas por los escombros de la iglesia protestante que se derrumbó cuando en su interior se celebraba una misa, indicaron testigos.
Otras 20 víctimas mortales se registraron en el pueblo de Tarlay, ubicado cerca del epicentro del seísmo, que causó también el derrumbe de al menos 50 edificaciones, informaron funcionarios gubernamentales de Tachilek.
La radio estatal birmana informó de que 111 personas fueron trasladadas al hospital general de Tachilek, donde las autoridades birmanas establecieron el centro de rescate y de ayuda a los damnificados.
El mismo anuncio oficial cifró en 390 los edificios destruidos y señaló que además el seísmo causó el derrumbe de 14 monasterios budistas. Según fuentes oficiales, en Tachilek, unas 130 edificaciones se derrumbaron o resultaron dañadas, mientras que en la de Mong Lin, la cifra de edificios derruidos o con daños era similar.