Vitoria. Un total de 690 profesionales de la pedagogía han pasado estos días por el Palacio Europa de la capital alavesa para asistir a las jornadas organizadas por Euskal Herriko Ikastolak-Ikastolen Elkartea (EHI). En representación de 87 ikastolas y centros de toda la geografía vasca y acompañados de técnicos de los Centros de Apoyo a la Formación, han debatido sobre el futuro del sector y establecido una serie de conclusiones, entre las que destacan el desarrollo de un currículo propio.
"No podemos ocultar la alegría que nos ha producido el conocer de primera mano algunos de los proyectos que las ikastolas están llevando a cabo en el campo del desarrollo curricular. Se trata de proyectos innovadores, muy variados y en, todo caso, enriquecedores. En futuras ediciones de las jornadas habrá ocasión de seguir conociendo otras experiencias que serán exponente de nuestro compromiso por la mejora de la enseñanza", señalaron los responsables de las jornadas. Desde la propia EHI se ha avanzado asimismo una propuesta innovadora en este campo. "Estamos seguros de que servirá para reforzar el trabajo diario de las ikastolas y de que tendrá una influencia decisiva a corto y medio plazo", avanzaron.
Los portavoces de Ikastolen Elkartea subrayaron la necesidad de reforzar los liderazgos que gestionen el cambio y las mejoras en la enseñanza. "Dicha gestión -explicaron- deberá llevarse a cabo desde una perspectiva global que coordine y cuide el desarrollo coherente de las cuatro dimensiones o campos de juego que tiene toda ikastola: el campo curricular, el organizativo, el profesional y el comunitario. Es necesario que incidamos en los cuatro campos a la vez, para que las innovaciones y mejoras cuajen y se sistematicen".
Lugares de crecimiento Desde EHI se insistió en que las ikastolas, además de lugares de trabajo, son también espacios en los que se plasma el crecimiento personal y profesional del personal académico. "Como si se tratara de las dos caras de una moneda, las ikastolas son espacios de enseñanza y de aprendizaje. Queremos tender puentes para que las nuestros centros se vayan convirtiendo en comunidades de aprendizaje. Estamos dando los primeros pasos. Nuestros docentes están llamados a trabajar en común, reforzando los lazos sociales e intelectuales entre ellos", ahondaron.
Además, insistieron en la necesidad de mantener el perfil propio del profesorado "que queremos seguir desarrollando y mejorando". "Cada ikastola debe de analizar su situación y poner los medios necesarios para avanzar en esta vía. Debemos tender a una mejor utilización de los medios que tenemos más a mano", reconocieron. Para ilustrar esta idea recurrieron a la observación del trabajo del aula o a la utilización del "amigo crítico". "Se trata de un instrumento que tiene que basarse en la confianza mutua, pero que es de fácil utilización y que permite la mejora en los métodos de trabajo", añadieron. "Las ikastolas hemos sabido responder a las necesidades de nuestro entorno desde nuestra creación -señalaron desde EHI-. Pero tenemos que seguir imaginando los escenarios del futuro, anticipándonos a los retos que han de venir, adecuándonos a las exigencias de una sociedad en continuo cambio".
Las jornadas han reafirmado a las ikastolas en la importancia de la evaluación sistemática de los objetivos marcados y de la puesta en común de sus resultados, como el mejor instrumento para hacer frente a los factores que inciden en la educación. "Estamos dando pasos para pasar de una cultura de las actividades a otra más centrada en la reflexión, la evaluación y la investigación", concluyeron.
