vitoria. Dos hombres de 31 y 32 años fueron detenidos el viernes en Vitoria acusados de apoderarse de 5.600 euros mediante el denominado timo de los billetes tintados. La Ertzaintza fue alertada por un vecino de la capital alavesa de que tenía retenidas a dos personas en el interior de su empresa que habían contactado con él alegando su interés en la compra de dos vehículos, que había puesto a la venta, y le habían estafado un total de 5.650 euros.

Según relató, a principios del mes de marzo concertaron una cita para "ultimar detalles" en la empresa de la víctima. Al encuentro, acudieron tres personas, una de las cuales se presentó como diplomático de un país africano interesado en la compra de varios vehículos. Los estafadores le indicaron que disponían de importantes sumas de dinero que sacaban de forma clandestina de su país de origen en forma de papel tintado para evitar ser detectado en las aduanas de los aeropuertos. Para ello hicieron una supuesta demostración con un billete de 50 euros que la propia víctima les proporcionó.

Tras esta demostración, acordaron reunirse otro día para realizar una supuesta transformación de 5.000 euros. A la cita acudieron dos de los individuos, que sacaron los billetes negros y pidieron a la víctima que les trajera agua templada, momento que aprovecharon para realizar el cambio y empaquetar los supuestos billetes para llevar a cabo la transfrmación. Tras unos minutos, simularon que algo había salido mal y dijeron a la víctima que debían de comprar nuevos reactivos químicos para hacer de nuevo la operación. El paquete lo dejaron bajo llave en un caja fuerte y quedaron en volver a verse una vez adquirieran nuevos líquidos en Francia. La víctima les dio 650 euros más para comprar esos productos y quedó a la espera.

Transcurridos unos días, y en vista de que los individuos no aparecían, comenzó a sospechar de que había sido víctima de una estafa. Por propia iniciativa fue a la zona donde dos de los individuos se habían encontrado por primera vez con él y, tras establecer contacto con ellos, decidió tenderles una trampa ofreciéndoles 10.000 euros para efectuar nuevamente el proceso y recuperar el dinero anterior. Una vez que los hombres aparecieron por su oficina les encerró y avisó a la Ertzaintza, que, tras tener conocimiento de lo sucedido, procedió a la detención de ambos por su presunta participación en un delito de estafa.