huelva. Una prima segunda de Mari Luz que horas después de desaparecer la pequeña, el 13 de enero de 2008, fue a la casa de los hermanos Del Valle, dijo ayer que en ese momento Santiago del Valle decía que "él no se iba a comer ningún marrón". Esta testigo, uno de los 14 que declararon ayer durante la tercera sesión del juicio por el caso Mari Luz que se celebra en la Audiencia Provincial, indicó que su presencia en el domicilio de Santiago del Valle fue en torno a las 20.30 ó 21.00 horas, unas cuatro horas después de que se viera por última vez a la niña. Aseguró que le llamó la atención de la vivienda que era como "muy siniestra", y que le dio "mala impresión". Allí estaban Santiago y Rosa del Valle, y la mujer de él, Isabel García, ésta última gritando algo así como "los gitanos". Fue entonces cuando, según la testigo, Santiago dijo que "no se iba a comer ningún marrón", mientras que Rosa, indicó, no oyó que dijera nada.

Por otra parte, un compañero de Del Valle cuando éste se matriculó en el IES San Sebastián de Huelva, declaró ayer en el juicio que el principal acusado le dijo en el instituto que "había estado con una chiquilla".