vitoria. La asistencia sanitaria a los vecinos de la zona rural alavesa se viene "desarticulando" progresivamente. La dificultad para acceder a los distintos recursos por las características poblacionales y geográficas de la provincia y el recorte paulatino de las prestaciones, cada vez más concentradas en Gasteiz, generan un creciente agravio comparativo sobre el que ayer pusieron énfasis varios representantes de Aralar. La formación abertzale ha presentado una batería de medidas "necesarias" para garantizar la mejor atención posible a unos ciudadanos que, con los años, han pasado a ser tratados en muchos aspectos como de segunda. "La consecuencia final es el descrédito de la Sanidad pública y la apuesta por la contratación de servicios privados", advirtió el juntero Iñaki Aldekoa, a quien acompañaron, entre otros, el parlamentario Dani Maeztu o la cabeza de lista para los próximos comicios municipales en Agurain, Laura Ruiz de Alegría.
Siete iniciativas sintetizan las exigencias de Aralar al departamento dirigido por Rafael Bengoa. La primera, que se restituya el servicio de Ginecología en la zona rural, porque actualmente las mujeres que necesitan ser vistas por un especialista se ven obligadas a desplazarse a Vitoria. A juicio de Aralar, debería recuperarse la especialidad "en cada una de las grandes zonas que conforman el herrialde, tal y como existía previamente". Además, la formación apuesta por poner en marcha un servicio itinerante de pruebas de cáncer de mama, habilitando para ello autobuses con el material médico necesario para llegar a todas las zonas rurales eliminando "costes estructurales importantes".
Otra especialidad en claro declive, la Pediatría, centra también las preocupaciones de la fuerza política. Con el objetivo de mejorar las condiciones de las plazas públicas, aumentar su número y copar la demanda actual, Aralar cree necesario realizar una "apuesta estratégica conjunta" entre la UPV y Sanidad y presentar un análisis de la necesidad real de la Pediatría. Como ya avanzó este periódico el pasado noviembre, la zona rural alavesa ha perdido en pocas semanas dos de los seis especialistas que pasaban consulta por los pueblos del territorio. Ahora, sus funciones las cumplen médicos de familia, una de las situaciones "más graves" a juicio de la formación.
Aralar, además, cree imprescindible mejorar el servicio de emergencias y adecuarlo a la realidad alavesa mediante convenios con las provincias y comunidades limítrofes, como La Rioja o Castilla y León, para gestionar de forma más eficiente el transporte en ambulancias. Para la formación nacionalista, además, debería aparcarse la reordenación asistencial prevista para Gasteiz en favor de la construcción de un tercer hospital de carácter comarcal en Salburua, con una buena comunicación con las zonas rurales. Por último, Aralar exigió que se mejoren las condiciones de los trabajadores de los centros de salud para mejorar la calidad del servicio y apostar por "no privatizar ni gestiones ni procesos".
Maeztu y Aldekoa exigieron a Sanidad que cumpla cuanto antes con dos compromisos pendientes, presentar en el Parlamento la segunda parte del mapa de recursos y necesidades para Álava y acatar una proposición no de ley por la que se le exigió información detallada sobre la asistencia en la zona rural. Esto y, sobre todo, el cumplimiento de sus exigencias "ayudaría a superar la situación de indefensión de la ciudadanía" de la zona rural.