la evolución de la red de redes

El móvil con conexión a Internet empieza a ser el pan de cada día. Foto: dna

La descarga en los móviles, precedente que esgrimen las compañías

Los operadores piden que paguen más los usuarios que más usen internet, como ya pasa en los móviles

vitoria. El usuario con Internet en el móvil lo sufre ya en propia carne. La compañía de turno cobra en función de los consumos que haga, pero además le penaliza cuando sobrepasa el límite contratado de descarga, de manera que pasa de una velocidad de Ferrari a la de un Smart. La popularidad del iPhone y la proliferación de todo tipo de smartphones, o móviles inteligentes, han multiplicado la demanda de comunicación a través de las redes inalámbricas, con una velocidad tal que las reglas que dominan el mercado del Internet móvil son ligeramente diferentes. A juicio de las asociaciones de usuarios, la neutralidad de la Red ya está en cuestión en este sector y se quiere clonar la situación a las líneas fijas de los hogares y centros de trabajo.

El ejemplo más claro del apagón en Internet para móvil está en la limitación del servicio de Skype, empresa que permite llamadas telefónicas a través, precisamente, de Internet, sin tener que pagar a la compañía telefónica. Tampoco es posible utilizar programas de intercambio de archivos en los smart-phones, toda una tendencia que podría extrapolarse a la totalidad de Internet en unos pocos años. Para comprender la relevancia del asunto, no hace falta más que comprobar la petición realizada por Redtel, la asociación española de operadores de telecomunicaciones que agrupa a Telefónica, Vodafone, Orange y Ono. Su presidente, Miguel Canalejo, reclama fórmulas para hacer frente al crecimiento de los datos y menciona la posibilidad de pagar por el uso, de manera que si se supera un límite se paga más, como ya ocurre en internet para móvil. "Esta opción ya está definida en el móvil y es una cuestión en la que habrá que profundizar". Canales ha ido incluso más lejos al sugerir que los proveedores de servicios y aplicaciones en internet para telefonía móvil tendrán que compartir sus ingresos con las compañías telefónicas, con el fin de aligerar las inversiones que estas deben acometer para mejorar las infraestructuras.

Otro foco de atención está en Estados Unidos, con un sector online muy desarrollado y que es considerado clave para otros países. Este mismo mes la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) se ha mostrado en desacuerdo con que los proveedores estén facultados para bloquear cualquier tipo de tráfico legal, pero favorable a que puedan reclamar pagos según descargas, al igual que ahora ocurre con internet móvil. Ya lo dice el refrán: cuando las barbas de tu vecino veas pelar...