san sebastián. El Instituto Vasco de la Mujer, Emakunde, anunció ayer que "acata, pero no comparte" la sentencia del Tribunal Supremo (TS) que confirma la pena por homicidio de Nagore Laffage y rechaza el recurso interpuesto para que el crimen fuera considerado constitutivo de un delito de asesinato. Asimismo, expresó su apoyo a la familia de la joven irunesa e insistió en que esta tragedia debería haber sido juzgada como un caso de violencia de género.
La Sala de lo Penal del alto tribunal confirmó el lunes la pena de doce años y medio de prisión para el psiquiatra José Diego Yllanes por un delito de homicidio por la muerte de Nagore Laffage durante las fiestas de San Fermín de 2008. En ese sentido, el Instituto Vasco de la Mujer aseguró que "lamenta que no se haya considerado probada la alevosía" pese a los esfuerzos de la familia por conseguir la declaración de asesinato y que se haya ratificado la primera sentencia.
"El asesinado de Nagore Laffage y las sentencias que se han producido tras el juicio han puesto de manifiesto que las agresiones sexuales y la violencia que sufren las mujeres deberían poder juzgarse con la Ley Integral de Violencia contra las Mujeres, cuestión que sería factible si el supuesto no se redujera tan sólo a la existencia probada de una relación entre víctima y agresor", subrayó Emakunde.
A juicio de esta institución, si el crimen de la joven irunesa se hubiera juzgado como un caso de violencia de género "la sentencia hubiera podido hacer una mejor justicia a la memoria de Nagore y al dolor de su familia". La madre, Asun Casasola, ya reconoció este mismo lunes sentirse muy decepcionada: "Estaba convencida de que la palabra asesinato iba a salir. Es por lo que siempre he luchado porque está claro que hubo alevosía. Nagore recibió una gran paliza y estaba indefensa, y él era consciente de lo que estaba haciendo".
