Vitoria. El futuro Hospital Universitario de Álava comienza a tomar forma sobre el papel. Principalmente, una de las piezas más importantes de este enorme puzle cuya configuración física definitiva no está prevista hasta dentro de cinco años. Se trata del edificio de consultas externas que emergerá junto a las actuales instalaciones de Txagorritxu, el primero de los pasos del magno proyecto ideado por el Departamento vasco de Sanidad de la mano del Partido Popular.

Según confirmaron ayer fuentes de Osakidetza, el equipo encargado de echar a andar el Hospital Universitario, encabezado por el intensivista Alberto Manzano, ultima el plan funcional del bloque de consultas y su proyecto arquitectónico básico. De hecho, ambos se encuentran "a punto" y podrán ser presentados en sociedad si no surgen retrasos de última hora "en pocas semanas, a lo largo de octubre o comienzos de noviembre".

La estructura se situará en una parcela propiedad del Gobierno Vasco entre Bulevar de Euskal Herria y la calle Pablo Neruda -junto a la rotonda de Telefónica-, contará con un amplio recinto de parking, dividido en una estancia en superficie y otra subterránea, más de 100 espacios en su interior por la treintena con la que cuenta ahora y su coste superará según las primeras estimaciones los 30 millones de euros. "Será una cuantía potente, por lo que el concurso quizá se abra también a la Unión Europea", puntualizaron los mismos medios. El edificio, pese a que estará separado del núcleo central de Txagorritxu por la carretera, se unirá a él a través de una estructura de pasos que facilitarán la conexión.

inicio de las obras Una vez culminado este complejo proceso de diseño físico del bloque y dimensionamiento de sus servicios arrancará el proceso de licitación y, posteriormente, las primeras excavadoras comenzarán a trabajar nunca antes de 2011. Al tiempo que estos trámites se lleven a cabo, Osakidetza presentará al Ayuntamiento de Gasteiz el plan arquitectónico para que dé su visto bueno, apruebe el Plan Especial de Ordenación Urbana de la parcela y conceda la licencia de obra.

El grupo de trabajo liderado por Manzano e integrado por profesionales de Txagorritxu y Santiago apenas ha descansado durante el verano para acelerar este proceso, y de hecho también ha comenzado a desarrollar el plan funcional general del Hospital Universitario, que no estará listo como mínimo hasta el próximo verano. Este documento, que contará con un calendario de actuaciones, está llamado a delimitar con una mayor precisión los medios humanos y materiales con los que contará la nueva infraestructura, así como su dimensionamiento.

Cabe recordar que junto al edificio clásico de Txagorritxu, que será remodelado, se levantarán al margen del bloque de consultas externas una unidad materno-infantil, un bloque quirúrgico, un Instituto de Investigación Biosanitaria. El nuevo hospital se convertirá en el único para pacientes agudos de Álava, mientras Santiago verá reducidas sus instalaciones a un único pabellón y tratará a enfermos crónicos en un parque de 120 camas. Txagorritxu ampliará las suyas hasta las 735.

Pese a la crítica coyuntura económica, la inversión global prevista para la infraestructura sanitaria, superior a los 120 millones de ellos, está "garantizada" según aseveró recientemente el viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández.