vitoria. Un entorno privilegiado como escenario y un acto de lo más emotivo como regalo se unieron ayer para celebrar en Gasteiz el Día Mundial del Alzheimer. Bajo el lema elegido este año para conmemorar la efeméride, Juntos podemos, la Asociación alavesa de Familiares de personas con enfermedad de Alzheimer y otras Demencias (Afades) reforzó su llamamiento a la implicación de todos los estamentos de la sociedad para avanzar hacia la erradicación de esta cruel patología. El colectivo, además, nombró a su nuevo socio de honor, una distinción que cada 20 de septiembre recae en un personaje vinculado al territorio e ilustre por su trayectoria profesional. El elegido en esta ocasión ha sido el contratenor vitoriano Carlos Mena, quien deleitó a los asistentes con su rico registro vocal, recibió la insignia del colectivo y un ramo de flores y, posteriormente, estampó su firma en el libro de oro de Afades, donde también figuran personalidades como el ex jugador del Deportivo Alavés, Jorge Valdano, o el director y fundador de la Coral Manuel Iradier, Emilio Ipinza, sus dos predecesores.

Alrededor de 5.000 alaveses padecen esta enfermedad neurodegenerativa crónica que debido a su imparable crecimiento no ha dudado en catalogarse como la "epidemia del siglo XXI" por los colectivos de familiares y afectados. De hecho, si a comienzos del presente siglo se estimaba que 25,5 millones de personas padecían en todo el mundo algún tipo de demencia -el Alzheimer, la más común, incluida-, las previsiones de las Naciones Unidas indican que esta cifra se disparará hasta los 114 millones en 2050. Maribel Perea, presidenta de Afades, puso ayer voz a la reivindicación de todos ellos en el pórtico de la Catedral Santa María, donde se celebró la cita conmemorativa. El manifiesto elaborado por la asociación vitoriana y al que Perea dio lectura va muy en la línea de la exigencia transmitida estos días por la asociación nacional Ceafa de fijar una Política de Estado de Alzheimer, tal y como ya han hecho otros países del entorno más próximo.

"La dimensión de la enfermedad como de sus efectos o consecuencias exige un planteamiento integrador de abordaje específico", advierte el manifiesto, que además insta a las instituciones públicas a trabajar de la mano de las asociaciones para "sumar" y establecer planes conjuntos y complementarios.

Perea insistió en la necesidad de que las futuras políticas de intervención y prevención se centren "en la persona afectada y en su familia cuidadora", pero que a su vez sean "integradoras" y estén sustentadas sobre una dimensión socio-sanitaria, propia tanto del Alzheimer como de otras demencias afines; también, en que el abordaje del problema "no sea propiedad excluyente", sino más bien configurador de un marco de relación multidisciplinar. "Quiero no proponer, sino exigir, que tanto las asociaciones como las instituciones de carácter social y sanitario y la sociedad en general participemos y nos impliquemos ya que tal y como nos marca el mensaje de este año, juntos podemos", zanjó la presidenta de Afades.

interacción Carlos Mena, nacido en 1971, formado en la Schola Cantorum Basiliensis de Basilea (Suiza) y que ha actuado en salas de medio mundo -desde Buenos Aires a New York, pasando por Tokyo o Melbourne-, tomó después la palabra y apenas tardó en hacer lo que mejor sabe, comunicarse a través del registro vocal masculino más agudo, característico de las óperas barrocas. Y lo hizo estableciendo una emotiva relación musical con los espectadores, entre los que se encontraban destacadas personalidades políticas de la provincia, valiéndose de la adaptación de una pieza de Vivaldi.

Cantó Mena y, de fondo, también el público. Según recordó el artista "la memoria musical y el oído es lo último que se pierde", y de esta forma animó a los presentes a "guardar un recuerdo musical" de la cita de ayer como el que interpretaron. Mena, quien ha conocido la enfermedad en familiares cercanos, reconoció que ser nombrado socio honorífico de Afades "es un lujo y un honor" y no dudó en pedir a las instituciones "que se impliquen" en la lucha contra el Alzheimer. "Las enfermedades son muy duras, pero también oportunidades para cambiar y ser diferentes", recordó.

Como colofón, la rapsoda Carmen Vicente y la violonchelista Noelia Blázquez regalaron una soberbia actuación donde no faltaron grandes clásicos de la poesía española como Jorge Manrique, José de Espronceda o Gustavo Adolfo Bécquer, cuyos versos anticiparon el final del acto.

nueva herramienta Pese a las dificultades que a diario sufren los cuidadores de estos enfermos, de vez en cuando surgen noticias que invitan a la esperanza. Ayer se conoció la última. Un teléfono gratuito ayudará a partir de ahora a las personas que cuidan en el ámbito familiar a mayores en situación de dependencia -entre ellos, lógicamente, los enfermos de Alzheimer-. Atendido por dos psicólogas que proporcionarán conocimientos y herramientas sobre el cuidado y el autocuidado, Jakiten ha sido puesto en marcha por la Fundación Bizitzen en colaboración con el Gobierno Vasco. El servicio se prestará a través del número 900 100 356, de lunes a viernes, y de 8:00 a 15:00 horas, en el mail jakiten@personascuidadoras.org u on-line, a través de la webcam.