vitoria. La mala sensación se ha confirmado con la contabilidad. La feria de toros de La Blanca no sólo ha sido la más floja de los últimos tiempos en cuanto a los resultados artísticos obtenidos, sino también en lo que respecta a cifras de asistencia. Según los datos aportados ayer por el Ayuntamiento de Vitoria, el número de espectadores se un espectacular 8,4% respecto a la pasada edición.
En total, acudieron este año a los toros 57.033 personas, frente a las 62.325 de 2009. Una caída realmente significativa que Vitauri, la asociación que organiza la feria, atribuye de forma exclusiva a la crisis económica y no a cuestiones relativas a los carteles y las corridas, ya que los hosteleros también han sufrido un déficit importante de ingresos.
Lo cierto es que seis de las diez mejores ganaderías de España viajaron a Vitoria en esta edición, pero también es verdad que Vitauri no consiguió traer a algunos diestros de tirón que sí se han paseado por otras plazas de toros, como Morante o Cayetano, ya que pedían cantidades astronómicas por sacar la muleta.
Ahora, a la asociación le toca poner los números sobre la mesa y analizarlos, para descubrir los aciertos y fallos cometidos y tomar decisiones. Tiene casi un año por delante.