vitoria. El sector de la enseñanza está viviendo un final de curso realmente convulso. Si hace unas semanas eran los directores de las escuelas públicas los que amenazaban con dimitir en caso de que se recortaran las plantillas, ahora es la red concertada la que anuncia su intención de recurrir a los tribunales si el Gobierno Vasco reduce finalmente su financiación.

Los representantes de esta red, en la que están escolarizados el 50% de los alumnos vascos, se han unido para exigir a Lakua que rectifique su propuesta en materia de personal. Kristau Eskola, Ikastolen Elkartea, Eusko Ikastola Batza, Ikasgiltza y la Asociación Independiente de Centros de Enseñanza (AICE-IZEA) ofrecieron ayer una rueda de prensa conjunta para denunciar que la decisión adoptada por el Ejecutivo vasco coloca a sus centros en "la ilegalidad".

Según explicó ayer el presidente de Kristau Eskola, Aitor Bilbao, que ejerció como portavoz del grupo, el proyecto de ley de Modificación del Presupuesto incluye una reducción de gastos de personal para los colegios concertados similar a la prevista para los funcionarios de los centros públicos. Al parecer, dicha propuesta será llevada a votación el próximo 24 de junio en el Parlamento Vasco. Si el proyecto de ley prospera, se prevé una disminución en los sueldos de en torno al 2%, cuando los docentes de la concertada, según recordó Bilbao, cobran ya un 5% menos que los de la red pública.

Los colegios e ikastolas aseguran que el Ejecutivo autonómico les está obligando "a no abonar la totalidad de los salarios establecidos en los convenios colectivos", por lo que de aplicar la medida se encontrarían en una "situación de ilegalidad".

Los representantes de los centros concertados insisten en que están dispuestos a emprender acciones legales sin finalmente se materializan estos recortes que, según dicen, "no plantean un ahorro real" y por el contrario, provocan un "tensionamiento social".

Sin embargo, trasladan a Lakua su disposición al diálogo para tratar de encontrar medidas "realmente eficaces" que les permitan afrontar la crisis económica.

reticencia al cambio Por otra parte, la consejera vasca de Educación, Isabel Celaá, reiteró ayer que no se van a recortar las plantillas de la etapa obligatoria en la escuela pública y advirtió de que "el único peligro" al que puede enfrentarse ésta es la "reticencia al cambio" de algunos de los grupos que la integran. Celaá dejó claro en el Parlamento Vasco, durante una comparecencia, que "nunca" ha intentado reducir el número de profesores, sino "todo lo contrario". Sin embargo, los centros públicos, que recibieron la pasada semana la Relación de Puestos de Trabajo del próximo curso, reconocen que los recortes no han sido tan fuertes como los previstos inicialmente, pero insisten en que los recursos humanos siguen siendo insuficientes en buena parte de los casos.