vitoria. Hay lacras que parecen difíciles de controlar. La violencia de género es una de ellas. Pese a los esfuerzos institucionales y sociales, los casos de agresiones protagonizadas por hombres contra sus parejas o ex compañeras se suceden sin que se haya conseguido dar con la tecla adecuada que erradique esta sinrazón. Sin ir más lejos, agentes de la Ertzaintza tuvieron que intervenir ayer para arrestar a un joven de 26 años que, al parecer, había agredido a su esposa. Sin embargo, por trágico que parezca el suceso, lo es más la reincidencia del detenido, conocido por los policías al pesar sobre él otro caso similar de violencia de género.

Sea como fuere, lo cierto es que varios ertzainas detuvieron en la madrugada de ayer a un varón de 26 años de edad al que acusaron de ser el presunto autor de un delito de violencia de género. Al parecer, y siempre según la versión facilitada por el Departamento vasco de Interior, el arrestado habría agredido a su pareja. Las evidencias así lo reconocían, ya que la chica, que había denunciado en varias ocasiones anteriores a su agresor, presentaba marcas en la cara.

Según la denuncia, la mujer acompañaba al varón por la calle Reyes de Navarra, en pleno barrio de Zaramaga, sobre las cinco de la madrugada. Fue entonces cuando tuvo lugar el desagradable acontecimiento. Al parecer, el presunto agresor golpeó a su pareja en la cara y le sujetó por el pelo intentando evitar que ésta utilizara el teléfono móvil para comunicarse con el número 112 de emergencias. Finalmente, la víctima logró contactar con la Ertzaintza y en pocos minutos una patrulla llegó al lugar en el que se encontraba la pareja. La mujer, que tenía la cara enrojecida, explicó lo acontecido a los agentes y estos procedieron a la detención del varón por un presunto delito de violencia de género. El arrestado se resistió e intentó agredir a los ertzainas. La víctima fue evacuada a un centro hospitalario de la capital alavesa, donde fue atendida del estado que presentaba tras la agresión. La víctima había denunciado en varias ocasiones anteriores a su marido que, en septiembre de 2009, también fue detenido por la Ertzaintza por otro episodio de violencia contra esta misma víctima.

Datos escalofriantes Curiosamente, sucesos como el relatado se dan con cierta frecuencia en tramos de edad similares a los descritos. Parece que la lacra de la violencia machista no entiende de edades. Así lo recordó este pasado lunes la concejala popular Ainhoa Domaica en el transcurso de una Comisión de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Vitoria. En la misma se constató que a lo largo de 2008, 53 chicas de entre 14 y 25 años fueron asistidas en recursos municipales y forales después de haber sido víctimas de malos tratos por parte de sus jóvenes parejas masculinas, algo más de una por semana. Datos todavía más escalofriantes si se ponen en relación con la globalidad: el 15,5% de las mujeres atendidas en el Servicio de Atención a las Víctimas de Violencia de Género pertenecían a esta franja de edad.

Domaica cuestionó al concejal responsable de Servicios Sociales, Peio López de Munain, sobre las actuaciones llevadas a cabo por el Ayuntamiento para erradicar esta triste realidad, teniendo en cuenta que el Plan Local de Infancia y Adolescencia avanzaba la puesta en marcha de una campaña de prevención de la violencia de género entre adolescentes. Una actuación "urgente" a juicio de Domaica, viendo las frías cifras, a la que Munain puso plazos. En concreto, según el edil socialista, se encuentra ahora inmerso en la fase previa al diseño de esta campaña.