WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declaró ayer que le habría gustado saber a quién le tiene que "patear el trasero" por la tragedia medioambiental del Golfo de México.
En unas declaraciones a la cadena de televisión NBC, Obama añadió que si el presidente de British Petroleum, Tony Hayward, trabajara para él, le habría despedido por su respuesta a la catástrofe, el mayor desastre medioambiental de la historia de Estados Unidos.
Hayward declaró en un primer momento que el vertido de la plataforma Deepwater Horizon no tendría efectos considerables en el golfo, que a su entender era "un gran océano". "No estaría trabajando para mí después de cualquiera de esas declaraciones", señaló ayer el mandatario norteamericano.
Obama cuestionó directamente al presidente de BP, Tony Hayward, cuyas declaraciones sobre la marcha de los trabajos de emergencia han sido calificadas como "confusas" y hasta "falsas" por congresistas en Washington, así como políticos y pobladores locales afectados por el derrame.
Asimismo, defendió que no ha hablado con el ejecutivo desde que comenzó el desastre, el 20 de abril, porque "cuando hablas con alguien como un presidente de BP", va a limitarse a decir "todas las cosas correctas". "No estoy interesado en palabras, estoy interesado en acciones", apostilló.
También quiso subrayar que visitó por primera vez la zona afectada "un mes antes de que muchos de esos bustos parlantes estuvieran siquiera prestando atención". "Hablo con esa gente porque presumiblemente tienen las mejores respuestas, de tal forma que pueda saber qué trasero patear", aseguró Obama.
Por otro lado, el mandatario estadounidense admitió que la situación de los habitantes de las costas del golfo es complicada, pero mostró su convicción de que el país y la región se van a recuperar de esta tragedia pero necesian "ayuda efectiva y rápida".
Si bien Obama ha visitado en tres ocasiones la zona afectada por el derrame desatado dos días después de la explosión a fines de abril de la plataforma petrolera Deepwater Horizon, muchos críticos alegan que el mandatario no ha sido lo suficientemente duro con la empresa British Petroleum (BP), responsable de la catástrofe.
El presidente negó estar preocupado por el efecto político que podrían tener los desarrollos en el Golfo e insistió en que la Casa Blanca hará las gestiones necesarias para que se complete la limpieza de la zona y se indemnice correctamente a los afectados
incumplimiento de bp Entretanto, el Washington Post hizo públicas ayer unas investigaciones que apuntan a que BP ha incumplido en repetidas ocasiones durante la pasada década las normativas de seguridad y medio ambiente. Como consecuencia, EEUU podría prohibir a la petrolera británica presentarse a futuros concursos de licitación.
En 1999 BP asumió la responsabilidad de un vertedero ilegal hallado en una plataforma de extracción frente a las costas de Alaska. Para evitar sanciones se acogió a un plan de control quinquenal de la Agencia de Protección Ambiental. Al llegar a la presidencia de la compañía en 2007, Hayward se comprometió a reformar algunos aspectos de la misma.