oion. Tal y como le ha sucedido al resto de ayuntamientos alaveses que solicitaron autorización al Consejo de Ministros para la celebración de la consulta popular sobre el trazado de la línea de alta tensión, el Gobierno central confirmó ayer al Ayuntamiento de Oion la denegación de esa posibilidad.

El Ejecutivo español "entiende que esta solicitud no reúne los requisitos exigidos por la Ley Reguladora de Bases de Régimen Local, ya que no se trata de un asunto de carácter local. Según su justificación, la construcción de la línea de alta tensión discurrirá por dos comunidades autónomas, por lo que no es una competencia municipal. De hecho, la autorización de las grandes infraestructuras eléctricas corresponde al Ministerio de Industria.

Además, el acuerdo del gabinete liderado por José Luis Rodríguez Zapatero desvela que "la decisión cuenta con los informes favorables del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y de la consejería de Justicia y Administración Pública del Gobierno Vasco", a quienes se consultó previamente antes de denegar la celebración de la consulta.

La tardía respuesta del Gobierno central se refiere a la petición realizada a principios de año por los ayuntamientos de Oion, Campezo, Maeztu, Peñacerrada, Lagrán, Bernedo y Valle de Arana para poder celebrar esa consulta, idea que había propuesto la plataforma navarra en contra del trazado.

Como explicó en su momento el presidente de la Cuadrilla de Montaña Alavesa, José Ignacio Sáenz del Castillo, los ayuntamientos alaveses estaban de acuerdo con la celebración de una jornada para que los vecinos expresaran su opinión en torno al proyecto de Red Eléctrica Española, pero ajustándose a los procedimientos que establece la legislación. Es decir, contando con la preceptiva autorización del Consejo de Ministros, ya que en todo momento las acciones de protesta llevadas a cabo en el territorio histórico se habían ajustado a la legalidad.

Dado que la autorización no llegaba para el 31 de enero, en Álava se acordó no celebrar las consultas en los ayuntamientos, ni con personal o material de los consistorios, pero dejando abierta la posibilidad de que a título personal los vecinos que lo desearan colocaran mesas con urnas y publicidad para recoger esos testimonios. Así, en Santa Cruz de Campezo se usaron los soportales de acceso al Ayuntamiento; en Labraza, el centro social; y en Bernedo, otro centro social anexo a la parroquia. En el resto de municipios no se realizó ninguna instalación.

Aquello motivó unas ácidas declaraciones de un portavoz de la plataforma navarra y, desde entonces, los municipios alaveses acordaron continuar por su cuenta a través de la Comisión creada al amparo de la Cuadrilla de Montaña Alavesa.