PARÍS. El francés Pierre Camatte, rehén de Al Qaeda en el Magreb hasta su liberación el pasado martes, contó el maltrato recibido durante sus casi tres meses de cautiverio, y subrayó que temió por su vida todos los días.
"Todos los días pensaba que había llegado mi hora", declaró Camatte en una entrevista a la emisora de radio "France Info" emitida hoy, en la que detalló que de sus secuestradores "recibía golpes, bofetadas, porque sí, amenazas directas con el cañón del kalashnikov".
El ex rehén francés, que debe viajar hoy desde Bamako a Francia, señaló que su secuestro, que se produjo el pasado 26 de noviembre, "ha sido físicamente agotador. Durante varias semanas me dolía todo.
Lo más difícil es que me prometieron que me vería un médico y no pude ver a ningún médico ni recibí ningún medicamento".
"Sufrí cólicos nefríticos porque el agua que me daban olía a gasolina. No me daban nada, ningún cuidado, estaba abandonado.
Además, el calor del Sahara, sin barrotes pero con la inmensidad, la soledad, el aislamiento...", explicó.
Camatte, al que anoche fue a ver el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en Bamako, afirmó que con su liberación acaba de "salir de un periodo doloroso en manos de gente que vive en otro mundo, que no respeta nada, totalmente fanatizados (...) He pasado cerca del fin." Igualmente dijo que se ha enterado de la cooperación entre los Estados francés y maliense, que ha llevado a la liberación de cuatro presuntos miembros de Al Qaeda en el Magreb encarcelados en Mali, como reclamaban los captores.
Sarkozy agradeció, sin nombrarla directamente, esa liberación que ha sido motivo de reprobación a Mali por Argelia y Mauritania, y elogió en un discurso en Bamako al presidente maliense, Amadou Toumani Touré.
"Queremos agradecer, y lo hago desde lo más profundo del corazón al presidente de Mali, que ha sido un hombre valiente (...) y que ha considerado que la vida de un hombre valían un cierto número de esfuerzos", comentó el jefe del Estado francés, antes de añadir que "si el presidente Toumani Touré no hubiera decidido lo que decidió, Pierre Camatte no estaría aquí".
Sarkozy, que se encontraba ayer en visita oficial en Gabón, decidió tras la liberación del rehén francés pasar unas horas en Bamako antes de su segunda y última escala africana hoy en Ruanda.
Camatte, de 61 años, fue secuestrado en un hotel de Menaka, en la región de Gao, al norte de Mali, tres días antes de que tres cooperantes españoles fuesen capturados en Mauritania por un grupo de hombres armados y llevados igualmente al norte de Mali.
Además de a los catalanes Alicia Gámez, Roque Pascual y Albert Vilalta, la rama de Al Qaeda en el Magreb Islámico mantiene también secuestrados en el norte de Mali a una pareja italiana.