madrid. El Consejo de Ministros aprobó ayer el nuevo Reglamento de los Centros de Reconocimiento de Conductores que obligará a estos centros médicos a remitir a la Dirección General de Tráfico (DGT) los historiales clínicos en los que se apoyan los informes de aptitud psicofísica que dan derecho al permiso o licencia de conducción.

A partir de ahora, estos informes se remitirán en formato telemático, en lugar de en papel, y de manera inmediata al Registro de Conductores e Infractores, junto al historial clínico del interesado. África Vicondoa Álvarez, coordinadora de uno de los Centros de Reconocimiento de conductores del Estado considera que "algunos centros pueden tener problemas para adaptarse a estas nuevas tecnologías, ya que harán falta unos equipos adecuados para ese tipo de actividad y será necesario un esfuerzo por parte del personal administrativo de estos centros.

Los centros cuentan con un plazo de seis meses para instalar el equipo informático necesario. Vicondoa asegura que todavía desconocen "si seremos nosotros o será Tráfico quien corra con estos gastos". Además, estos centros podrán gestionar con la DGT, cuando así lo solicite el interesado, la prórroga de la vigencia de los permisos o licencias de conducción. Esta medida supone un ahorro para los ciudadanos de más de 7 millones de euros, y de unos 3,5 millones de horas que hasta ahora se perdían en desplazamientos y gestiones administrativas ante Tráfico. Algunos centros ya venían realizando esta práctica.

Los informes de aptitud psicofísica valdrán en todo el territorio nacional, mientras que en la actualidad sólo podían utilizarse para tramitar los permisos en la Jefatura Provincial de Tráfico donde estuviera ubicado el centro. "Si todos los centros funcionaran correctamente estaría bien porque en teoría en todos se debe exigir lo mismo. Pero, a la hora de la verdad, hay centros que no funcionan del todo bien y suponen un coladero", señala Vicondoa.

Además, los centros de reconocimiento podrán contratar con una clínica la prestación de los servicios de oftalmología, de modo que no será necesario contar con un médico oftalmólogo en el propio centro especializado.

Vicondoa apunta que, "hasta ahora, en estos centros era obligatorio tener un médico, un psicólogo y un oftalmólogo durante todas las horas que permanecían abiertos al público. Al parecer, por presiones de distintos sectores, ahora ya no es necesario tener un oftalmólogo todas las horas de funcionamiento del centro, sino que éste puede tener contratado un servicio de oftalmología. Esto es negativo porque no hay cita previa y no se sabe cuándo un conductor va a acudir a un centro con un problema en la vista. Puede que el cliente llegue al centro y no tenga un especialista que le revise". Vicondoa sospecha que "muchos centros prescindirán del oftalmólogo, ya que supone un elevado coste".

Por su parte, el director facultativo será ahora el responsable de la firma del informe del aptitud psicofísica cuando el director del centro no reúna la consideración de facultativo.

Hasta ahora las inspecciones de estos centros eran escasas se realizaban de una forma aleatoria. Según la DGT, al recibir la información telemáticamente las inspecciones irán dirigidas a los centros en los que se detecten anomalías o desviaciones. "Eso está bien. Los centros tienen que cumplir unos protocolos y hay unos límites para todo tipo de patologías. En los últimos años se ha controlado poco", concluye Vicondoa.