Vitoria. La conexión de la N-I con la Cuadrilla de Rioja Alavesa va camino de convertirse en una vía rápida. El trazado de la A-124 entre los límites con La Rioja entre Briñas, Labastida y San Vicente de la Sonsierra será una de las obras que acometerá el Departamento de Obras Públicas y Transportes.

El teniente de diputado general, Claudio Rodríguez, explicó ayer que se trata de una "importante actuación largamente demandada, ya que las intervenciones en la carretera de Rioja Alavesa hasta el momento habían dejado aislado este tramo".

Y es que el proyecto es uno de los anhelos más perseguidos por los diferentes gabinetes que han liderado la Diputación alavesa a lo largo de las últimas legislaturas ya que la carretera padece una circulación intensa de centenares de vehículos diarios en su tramo por el territorio histórico. La conversión en autovía del tramo más utilizado de la carretera, empezó a esbozar rasgos de materialización en agosto del año pasado. En esa época se iniciaron los trámites para que la N-124 se convirtiera en una autovía entre la N-1 y Zambrana ya que el boletín asentó las bases para contratar la redacción del proyecto de desdoblamiento. El proyecto aprobado tiene un presupuesto de 2.367.000 euros y actuará en dos tramos: uno, de 1,1 kilómetros entre Briñas y Labastida, y otro, de 2,8 kilómetros entre Labastida y el término municipal de San Vicente de La Sonsierra. La mejora supondrá pasar de la actual y bacheada calzada de seis metros de anchura y sin arcenes, a una nueva de siete metros, con sendos arcenes de 1,5 metros, lo que posibilitará una velocidad media de 80 kilómetros por hora para los más de 2.000 vehículos diarios que transitan por la zona.

El proyecto pasa ahora a información pública y luego a concurso, con lo que se espera esté adjudicado en verano. A partir de ese momento, el plazo de construcción es de 12 meses.