vitoria. Las diferencias entre los grupos políticos vascos con respecto a la mejor forma de proteger a los atuneros que faenan en el Índico son más que conocidas, después de la repercusión mediática que supuso el secuestro del Alakrana. Sin embargo, ayer, una estudiada ambigüedad permitió a PNV, PSE, PP, EA y UPyD exigir de común acuerdo al Gobierno central que proporcione seguridad militar a los arrantzales.
El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero se ha negado a embarcar a infantes de marina en los barcos pesqueros que operan en el Índico, apoyándose en la supuesta ilegalidad de la medida, y contra el criterio del PNV.
Los socialistas vascos respaldan la postura del Gobierno central, y de hecho su propuesta inicial de ayer, la que desembocó en la enmienda transaccional finalmente aprobada, apostaba por formar partidas militares en la propia Somalia para luchar contra la piratería, sin aludir a la seguridad directa de los atuneros más allá de una mayor implicación de la UE en la Operación Atalanta. Además, el PSE apostaba por promocionar pactos entre armadores para buscar otros caladeros más seguros en los que faenar.
Finalmente, salió adelante un texto que efectivamente pide una mayor intensidad para dicha operación militar, centrándose en el control de los puertos desde donde operan los piratas. El acuerdo también pide a España que, aprovechando su inminente presidencia europea, prepare, junto con Naciones Unidas, un "programa global de ayuda a Somalia que dote al país de estabilidad política, social y económica, con especial rigor en los aspectos de respeto a los Derechos Humanos y la erradicación del ejercicio de piratería".
Faltaba por salvar el escollo principal que separaba a los socialistas del resto de formaciones que respaldaron el texto, la presencia de militares en los barcos, así que se optó por una redacción lo suficientemente cuidada como para que contentara a todos los partidos. "El Parlamento Vasco insta al Gobierno español a utilizar todos los recursos disponibles, incluidos los militares, para proteger a los pesqueros españoles frente a la piratería", reza el segundo punto de la transaccional, sin especificar si esa protección militar se debe prestar dentro o fuera del barco.
"Las fragatas o los helicópteros también son un recurso militar, nosotros no estamos por embarcar a infantes de marina, afirmó el socialista Benjamín Atutxa para justificar su voto favorable, una explicación que sin embargo despertó las críticas del PNV. Unai Rementeria, parlamentario jeltzale y a la sazón alcalde de Mundaka, una de las localidades que vivió en primera persona el secuestro del Alakrana, criticó la flexibilidad del PSE por "firmar el punto" referente a la protección militar. "Usted y yo conocemos el sentido de ese punto", le puntualizó Rementeria a Atutxa.
También el Partido Popular aseguró que la mención directa a la presencia de infantes de marina en los atuneros habría hecho imposible la aprobación del texto, según explicó Antonio Damborenea.
Finalmente se logró el acuerdo, aunque sin los votos de Aralar y Ezker Batua, partidarios de reforzar la ayuda a Somalia, pero contrarios a cualquier tipo de intervención militar en la zona, donde los pesqueros vascos siguen realizando su trabajo.