Vitoria. Hoy es el Día Mundial contra el sida y hay poco que celebrar. Es la jornada en la que el mundo recuerda la peor pandemia del siglo XX, ésa que en tan sólo 25 años ha segado infinidad de vidas y aún amenaza con engordar su trágico bagaje. No en vano, la enfermedad no conoce cura más allá de la prevención y sigue reclutando tristes afiliados en los países del Tercer Mundo y en los opulentos estados occidentales. Por todo ello hoy más que nunca, es importante recordar que la lucha contra el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH) es una pugna diaria, que no se debe abandonar a pesar de que a veces las circunstancias inviten a ello.
O, en ocasiones, obliguen. Y es que, a ciertos colectivos o ciudadanos de distintos países del mundo no les resulta fácil iniciar la lucha contra los efectos de un virus mortal. De ahí el lema de la jornada de este año: Acceso Universal y Derechos Humanos. Esta leyenda recuerda la necesidad crucial de que todas las personas puedan acceder a los métodos de prevención, tratamiento, atención y apoyo. También es un llamamiento a quitarse los prejuicios de encima y entender esta enfermedad como lo que es. En definitiva, hoy es el día para eliminar estigmas y rechazar la discriminación y recordar que no todos somos igual de vulnerables ante el VIH.
Para ello se van a realizar distintas iniciativas que comenzaron este mismo fin de semana con una campaña conjunta de comunicación y prevención entre uno de los sectores de mayor riesgo. La Comisión Antisida repartió alrededor de 3.000 preservativos y materiales de prevención en bares del Casco Viejo para advertir de la necesidad de tomar medidas de precaución a la hora de mantener relaciones sexuales.
No es la única actividad. De hecho, a lo largo de la mañana de hoy, a través de unas mesas informativas la asociación también trasladará a los interesados los métodos prevención, las formas de transmisión y todas las dudas presentadas en la Biblioteca del campus universitario. Esta tarde será realmente el momento de los afectados. Y es que un grupo de seropositivos ingresados en la cárcel de Nanclares y otro de residentes de la casa de acogida podrán disfrutar de una particular excursión. A partir de las 17.00 horas visitarán el Parlamento Vasco para comprobar cómo funciona la Cámara y conocer sus instalaciones.
Mañana, el palacio de Montehermoso será escenario de una mesa redonda en la que varios expertos en esta enfermedad y su entorno tratarán diversos temas como la reproducción y el VIH -a cargo del doctor Jorge del Romero, del centro ITS Sandoval-; las perspectivas del tratamiento antirretroviral en los últimos diez años -de la mano del doctor de medicina interna de Txagorritxu Joseba Portu-; autoestima y estigma social -con la psicóloga de la Comisión Antisida Estíbaliz Díaz; y la situación de las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) -con la enfermera de la consulta de ETS del Hospital de Basurto-.
El mismo miércoles por la tarde, el contratenor Carlos Mena ofrecerá un concierto en el palacio de Montehermoso al que le seguirá una actuación de Detritus Teatro, con una obra relacionada con los temas de la Comisión Antisida, y un DJ. Además, se podrán adquirir camisetas ideadas y cedidas expresamente para la ocasión por una diseñadora local.
Un amplio repertorio de actividades con el que se espera remover conciencias poder frenar la tendencia apuntada en este territorio en 2008. Y es que los registros señalan que durante 2008 fueron 39 los vecinos del territorio que contrajeron el VIH duplicando las cifras de 2007 que marcaban una línea descendente en la provincia.
En ese sentido, el consejero de Sanidad del Gobierno Vasco, Rafael Bengoa, indicó ayer que 40 personas mueren al año por sida en Euskadi. A su juicio, estos registros se refieren a "una mortalidad muy baja gracias a los avances registrados en antibióticos y vacunas de las enfermedades que se derivan de una infección por VIH". El consejero advirtió que el 75,5% de las nuevas infecciones que se registran actualmente en la CAV se producen por vía sexual.
Bengoa recordó que el 68% de los contagios se corresponde con varones y el 32% a mujeres. Tan sólo en un 9% de los nuevos casos (17), se propagó por vía intraveosa. En el 15,5% restante, los afectados manifestaron desconocer cómo se habían contagiado.