Vitoria. El polémico asunto del yacimiento de Iruña Veleia sigue dando de qué hablar. En esta ocasión, Aralar reclama, por un lado, que se materialicen las pruebas físico-químicas pertinentes sobre los grafitos hallados en 2005 y 2006. Y por otro, muestra su total oposición al convenio firmado entre la Diputación Foral de Álava y la UPV, y pide que se paralice.

La agrupación considera que "puesto que no se puede concluir de forma definitiva ni la autenticidad ni la falsedad de los grafitos", se requiere de la realización de las pruebas físico-químicas. Asimismo, y ante la negativa del ente foral a la realización de dichas pruebas, la formación abertzale no entiende esta decisión, ya que "la Diputación sería la principal beneficiada".

Precisamente, el gobierno foral ha llegado a un acuerdo con la UPV, denominado Plan Director para los próximos diez años. En este sentido, también Aralar exige, bien su anulación, bien la suspensión temporal por varias razones. Por un lado, por cuestiones de oportunidad, ya que, de momento, "no se ha declarado la falsedad de ningún grafito". Segundo, por cuestiones de forma, ya que según la formación "no se cuenta con el respaldo del Departamento de Arqueología de la UPV" y, por último, por cuestiones de contenido. El partido jeltzale considera "inconcebible que se asignen 100.000 euros para dos meses con el único objetivo de redactar un plan".

Respecto al equipo asesor de Julio Nuñez, asegura no entender que todos menos uno de los más de veinte componentes del grupo sean de fuera de País Vasco. Por último y respecto a la falsedad de los grafitos, Aralar considera que los informes de la comisión científica asesora, los cuales apuntan hacia la falsedad, "han sido ampliamente contrarrestados por los trece informes a favor de la autenticidad aportados por los arqueólogos destituidos".