Álava es, sin duda alguna, un verdadero paraíso para todos los amantes del senderismo y las actividades al aire libre. Al margen de sus ríos o valles, entre otros puntos, sus paisajes montañosos ofrecen una gran cantidad de rutas. Hablamos de planes perfectos para quienes disfrutan de la aventura y del contacto directo con la naturaleza.
Desde las cumbres más elevadas hasta los parajes más desconocidos, los montes alaveses invitan a sumergirse en la belleza y diversidad de nuestra provincia, siendo una joya visual para quienes llegan a sus cimas.
Cinco montes para fusionarse con la naturaleza
Para descubrir las maravillas naturales de Álava, a continuación proponemos seis montes de la provincia para disfrutar a través de excursiones.
El listado está conformado en base a criterios como la belleza de estos picos o la relevancia de estos en la geografía alavesa, entre otros.
Gorbeia
Con sus 1.481 metros de altura, el Monte Gorbeia es uno de los principales destinos para los montañeros en Álava. Situado en el Parque Natural del Gorbeia, este monte no solo destaca por su altitud, sino también por la variedad de paisajes que ofrece.
Desde sus inmediaciones, tenemos bosques de hayas y robles, praderas y barrancos rodeando su ascenso, ofreciendo vistas que cambian a medida que se gana altura.
Una ruta clásica de ascenso comienza en el pueblo de Murua, desde donde se inicia una caminata de aproximadamente 8 kilómetros hasta la cima, desde donde podemos ver una panorámica de todo el parque natural, junto con la icónica cruz de hierro que marca.
Sierra de Entzia
La Sierra de Entzia es una cordillera montañosa situada al sureste de la provincia. Es, asimismo, cercana a la Sierra de Urbasa de Navarra y una de las más espectaculares del territorio para admirar y recorrer.
Algunos de los puntos más destacados son el monte Mirutegi, el parque megalítico de Legaire, la balsa de Iturgaz y el laberinto de Katarri. Hablamos de una amalgama de lugares de interés para el montañero que combina naturaleza y belleza a partes iguales.
Entzia es, en definitiva, un destino popular para el senderismo, la escalada y otras actividades al aire libre, proporcionando una experiencia de naturaleza salvaje y tranquilidad.
Monte Palomares
El Monte Palomares, situado al sur de Álava, en la comarca de Montaña Alavesa, es una de las cimas menos conocidas de la provincia, pero no por ello menos atractiva. Con sus más de mil metros de altura, ofrece unas vistas privilegiadas de la Llanada Alavesa.
El ascenso al Monte Palomares puede realizarse desde el pueblo de Antoñana, en una ruta de dificultad moderada. A lo largo del camino, se atraviesan bosques de pinos y hayedos, y una vez en la cima, se puede disfrutar de una de las mejores panorámicas del sur de Álava.
Es un monte menos concurrido que otros picos más populares, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes busquen adentrarse en una experiencia más tranquila y en contacto íntimo con la naturaleza.
Peña del León
En la sierra de Toloño, una de las zonas más bonitas de Álava, se encuentra la Peña del León, un monte que destaca por su impresionante ubicación. La ruta hasta su cima es una de las más atractivas del parque, discurriendo entre acantilados, bosques y paisajes típicos de la montaña alavesa.
El sendero hacia la Peña del León se inicia en el pequeño pueblo de Lalastra (Valdegovía), y su ascenso no es muy exigente, lo que lo convierte en una opción ideal para una excursión en familia.
Desde la cima, se puede admirar el espectacular cañón del río Purón, uno de los tesoros naturales de Álava, y el entorno salvaje del Parque Natural de Valderejo.
Tologorri
El Tologorri, al noroeste de la provincia, es una de las cumbres más emblemáticas de la Sierra Salvada. Aunque no es la montaña más alta de Álava, su ubicación y vistas hacen de él un lugar espectacular para quienes disfrutan de paisajes impresionantes.
Respecto al ascenso, conocido como "El Nervio del Tologorri", parte desde el puerto de Orduña y sigue una cresta que se eleva sobre el valle.
Una vez en la cima, la panorámica es asombrosa. Desde el Tologorri se puede contemplar la Llanada Alavesa, el desfiladero de Delika y el impresionante Salto del Nervión, la cascada más alta de la Península Ibérica.