La Audiencia Provincial de Madrid ha ordenado al Juzgado de Instrucción Número 26 de la capital reabrir la causa por un presunto delito de amenazas contra el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, por los hechos ocurrido el 31 de diciembre de 2023, cuando se linchó y apaleó a un muñeco que le representaba frente a la sede central del PSOE, en la calle Ferraz.

En un auto, al que ha tenido acceso Europa Press, los magistrados estiman el recurso de la Fiscalía y parcialmente los recursos presentados por el propio Sánchez y por el PSOE anulando la decisión de la jueza instructora de archivar el caso. No obstante, rechazan la otra pretensión de Sánchez y el PSOE, que pedían que el juzgado madrileño derivara el caso a la Audiencia Nacional al entender que se trataba de un delito de injurias y amenazas al Gobierno, algo que la Audiencia Provincial descarta.

El convocante de la protesta, Antonio Martínez, a su llegada a la Comisaría de Moratalaz, a 3 de enero de 2024, en Madrid. EP

Delito de amenazas

De la misma forma, los magistrados rechazan que los hechos puedan ser constitutivos de delitos de odio y de injurias, indicando que se trataría de un presunto delito de amenazas. Loa magistrados indican que "la violencia de las imágenes del hecho, en que la figura es colgada de una soga y golpeada con brutalidad, además de sufrir otras vejaciones simbólicas", "unida a la profusión de amenazas contra el destinatario y referidas a la sede del PSOE --'colgadlo de los pies', 'hay que quemar Ferraz', 'a por Sánchez oé'--, (...) configuran un cuadro intimidante de suficiente intensidad como para, provisionalmente, hablar de amenazas graves".

"No puede apreciarse en este momento que tales amenazas tengan justificación suficiente en el libre ejercicio de la libertad de expresión, por más que se produjeran dentro de una manifestación de protesta cuya legitimidad, a priori, no parece discutible, independientemente de la ideología política que se encuentre detrás de su organización", dicen.