- El Gobierno Vasco quiere hacer posible una forma de gobernanza más transparente y donde cada ciudadano pueda constatar que sus demandas se atienden. Para ello, ha puesto ya en la pista de despegue el anteproyecto de Ley de Transparencia y Participación Ciudadana, abriendo en primer lugar una fase de consulta pública a través de la web de Irekia y del tablón electrónico de anuncios para que los vascos puedan realizar sus aportaciones y reflexiones sobre este debate que se abre. Lo que se propone la consejería de Olatz Garamendi es reforzar la transparencia y, en concreto, “impulsar una administración más abierta y transparente, que rinde cuentas de su gestión en tiempo real y colabora con la ciudadanía en la generación de valor público; todo ello, basado en el equilibrio entre la acción de gobierno, la sociedad civil y la actividad social y económica”.
Garamendi pretende tomar como referencia los principios de gobierno abierto internacionalmente contrastados, donde la ciudadanía se sitúa en el centro, y la administración rinde cuentas de modo autocrítico. El anteproyecto de ley forma parte, además, del Programa de Gobierno para esta legislatura y, en concreto, se sitúa en el compromiso número 148, de manera que, con este movimiento, el Gobierno Vasco también va cumpliendo las previsiones y el compromiso asumido con la producción legislativa.
La consejería de Garamendi considera acreditado que, en los últimos tiempos, ya se ha hecho un esfuerzo en materia de transparencia, como lo demostraría la información en tiempo real proporcionada durante la pandemia del coronavirus, o como lo probaría también el recuento de visitas al portal de transparencia Gardena, la web Legegunea, el Perfil del Contratante sobre las licitaciones y los contratos que tiene la administración pública, o el portal Open Data Euskadi.
Además, recuerda que Euskadi es miembro desde el 2018 de la Alianza Internacional del Gobierno Abierto, y esa adhesión supone asumir el compromiso de ejecución de planes de acción de gobierno abierto “ambiciosos”, y en colaboración con las diputaciones forales, los ayuntamientos de las tres capitales y la sociedad civil de la comunidad autónoma vasca.
Lo que se pretende ahora es ampliar y reforzar el modelo de transparencia para alcanzar nuevas cotas en ese sentido, y se abre un debate con aportaciones para nutrir en esa dirección el anteproyecto y poder presentar una visión más completa.