Las bases de ERC han aprobado este domingo con 669 votos a favor --un 97,24%--, 7 en contra y 12 en blanco la nueva ponencia del partido que actualiza la estrategia política de los republicanos reforzando su apuesta por el diálogo con el Gobierno para solucionar el conflicto catalán.

Así se ha aprobado en la Conferencia Nacional de ERC que se ha celebrado este fin de semana en La Farga de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), donde hace cuatro años el partido ya celebró una Conferencia de este tipo en el que consagró su giro hacia la vía negociada.

La ponencia, que ha coordinado el exconseller y actual vicesecretario general de prospectiva y Agenda 2030 de ERC, Raül Romeva, y que lleva por título 'Escrivim el futur republicà' (Escribimos el futuro republicano), no modifica sustancialmente la estrategia que ha seguido el partido en los últimos años y fija que "la mejor confrontación democrática es la mesa de negociación", aunque defiende la necesidad de trabajar para construir alternativas sin renunciar a ninguna vía.

Así, plantea la desobediencia política y social y las "acciones de desbordamiento democrático" como posibles alternativas para lograr un referéndum si la mesa de diálogo no funciona, aunque no concreta cómo se deben llevar a cabo ni en qué deben consistir, al igual que tampoco detalla en qué momento ERC dará por fracasada la mesa de diálogo.

Esto llega en un momento en el que la mesa entre los dos gobiernos está paralizada y sin fecha para la próxima reunión, y después de que el propio presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, planteara en el discurso de Navidad la necesidad de comenzar a preparar alternativas si la negociación con el Ejecutivo de Pedro Sánchez no da frutos.

METODOLOGÍA Y CALENDARIO

De hecho, en el documento se ha incorporado una enmienda que propone establecer en la mesa de diálogo una "metodología clara y un calendario acordado de reuniones que se pueda cumplir, así como también el retorno pertinente a la ciudadanía, y específicamente a la militancia, de los acuerdos fruto de la negociación".

Además de llamar a la movilización de la ciudadanía para contribuir a presionar al Gobierno en la resolución del conflicto, defiende la necesidad de rehacer la unidad estratégica del independentismo y advierte de que no se pueden poner "fechas fijas u hojas de ruta inamovibles".

NO RENUNCIA A NINGUNA VÍA

La ponencia también señala que, si la negociación con el Gobierno no se concreta con avances tangibles, ERC no descarta "ninguna vía democrática y pacífica para la consecución" de sus objetivos.

"No renunciamos ni renunciaremos a ningún instrumento democrático que nos permita decidir nuestro futuro colectivo para llegar a la república catalana", afirma la ponencia, que contempla apelar a la UE o a la ONU para hacer posible el referéndum e insiste en la amnistía y la autodeterminación como las dos soluciones al conflicto porque consideran que son los dos grandes consensos que hay en la sociedad catalana.

Además, insiste en la voluntad de los republicanos de combinar el diálogo y la estrategia independentista con el gobernar en el mientras tanto desde la Generalitat impulsando lo que ellos definen como políticas republicanas y transformadoras, ya que consideran que habrá más apoyo a una Catalunya independiente a medida que "más gente entienda que es una herramienta útil y al servicio del bienestar colectivo".

En este sentido, defienden hacer un "buen gobierno" contrapuesto a las políticas que se llevan a cabo desde el Estado, sitúan sus prioridades sectoriales y plantean los objetivos estratégicos que quieren alcanzar antes de 2030, en cuestiones como el refuerzo del estado del bienestar y la lucha contra el cambio climático, además de fijar el horizonte para la década de 2040.

SIN ARAGONÈS

ERC ha celebrado la segunda jornada de la Conferencia sin la presencia del presidente de la Generalitat y su coordinador nacional, Pere Aragonès, porque está participando en la Conferencia de Presidentes autonómicos en La Palma, por lo que no se han podido ver juntos los dos principales líderes del partido: el presidente del Govern y el presidente del partido, Oriol Junqueras, que no estuvo el sábado por una intervención quirúrgica en su rodilla.

Con esta Conferencia, los republicanos han buscado hacer una demostración de fortaleza del partido en un momento en el que poseen la Presidencia de la Generalitat, son determinantes en el Congreso y son uno de los principales partidos a nivel municipal, y de reafirmación en su estrategia pese a las críticas constantes que recibe por parte de Junts y la CUP, y los obstáculos que cree que pone el PSOE a la vía negociada.

Además, ha sido el primer gran acto con la militancia tras la pandemia del coronavirus y tras la salida de Junqueras de la cárcel con el indulto, y han exhibido la cohesión interna que tiene la formación aprobando la ponencia con muy pocos votos en contra.