- El PSE no comparte el malestar del alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, que el pasado jueves mostró su “sorpresa” y “contrariedad”, por no haber sido informado al respecto, tras el anuncio del Ministerio de Transportes de construir un apeadero temporal en Basauri como “solución provisional” para la llegada del Tren de Alta Velocidad (TAV) a la capital vizcaína. El parlamentario socialista Ekain Rico aseguró ayer que no entiende “la polémica” y desveló que “alguno de los que han asegurado” no haber sido informados, “sí que lo estaban”. “Cuando digo me consta, es me consta”, sentenció. “Veo la polémica artificial... Son polémicas que no llevan a ninguna parte. No sé si es cabreo por no estar en una foto o no, pero es ridículo. Lo importante es zanjar cualquier tipo de polémica”, argumentó, para añadir que “todos los representantes del Gobierno Vasco han destacado que lo importante es que el TAV avanza”.

El parlamentario del PNV Aitor Urrutia también se refirió a que han existido “errores y descoordinaciones” en este asunto, y consideró que “las sorpresas y malestares parecen lógicos”. “Probablemente, si yo soy el alcalde de Basauri hubiera manifestado lo mismo porque quiero saber lo que afecta a mi municipio... Pero lo sustancial es que la obra termine y haya un mejor nivel de información”, zanjó en declaraciones a Radio Euskadi, quedándose con que lo sustancial es el acuerdo para el soterramiento de las estaciones de Bilbao y Gasteiz. En parecida línea se pronunció el viernes el lehendakari Iñigo Urkullu. “Lo importante es que de una vez por todas podamos contar con el funcionamiento del TAV”, dijo de forma escueta sin querer ahondar en rifirrafes y matizando que esta falta de sincronía en la comunicación no afectará al Ejecutivo de coalición.

Desde EH Bildu, Iker Casanova aseveró que en 2027 habrá una línea de alta velocidad “no conectada a ninguna parte y convertida en una línea de cercanías”. “Es una obra absurda”, sostuvo. “Si los gobernantes que nos han traído hasta aquí no asumen las responsabilidades del desfase de una obra que vale 8.000 millones y que es un despropósito, estamos muy lejos de ser un país serio”, censuró el dirigente de la coalición soberanista A su juicio, la alta velocidad en el Estado español ha sido “un desastre” que ha “destruido el tren de cercanías y velocidades medias”. Por otro lado, añadió que “da un poco miedo” cuando se habla de estación provisional y puso el énfasis en que a los vascos el TAV no les sale gratis, ya que “se ha dejado de invertir en otras obras”.

Muy crítico con este tema se pronunció el portavoz parlamentario de PP+C’s, Carmelo Barrio, criticando el “continuo retraso” que se aplica desde el Gobierno central al TAV y evocando que con el PP gobernando había un cronograma de fin de las obras para 2023. “Desde la llegada del PSOE al Gobierno de España, el AVE es una incógnita para Euskadi. Es grave que los alcaldes no sepan de lo que se habla para el futuro de su ciudad, pero lo más grave es el continuo retraso que el Gobierno ha aplicado al AVE”, precisó, para añadir que el 2027 como año de entrada en funcionamiento del tren es “una fecha para volver a ser prorrogada en próximos años”.

Por su parte, para el parlamentario de Elkarrekin Podemos-IU Iñigo Martínez el TAV es “una larga historia y un despropósito absoluto” de los gobiernos central y vasco. “Nos va a costar miles de millones a la ciudadanía y no sabemos cuándo se va a poner en marcha”, alertó. A su entender, en Euskadi se debía haber apostado por las líneas de media velocidad entre las capitales, “sin supeditarlo todo” al TAV. “El Gobierno Vasco tiene la cifra de cero euros para las línea 4 y 5 del metro. Esa es su apuesta por la movilidad de cercanía”, verbalizó el dirigente de la formación morada.