- La Mesa del Parlamento Vasco rechazó ayer la petición de EH Bildu de anular la votación de parte de la reforma de la ley que regula el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) que la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejeria, permitió repetir después de que los parlamentarios de PNV, PSE y PP+C’s se equivocasen al votar. La Mesa adoptó esta decisión una vez leído el informe de los servicios jurídicos que avalan la decisión de Tejeria por ser una “resolución adoptada de plano, contra la que no cabe recurso parlamentario alguno”, por lo que si algún parlamentario viese vulnerado su derecho de participación recuerdan que tiene abierta la vía del recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. La polémica se produjo en el pleno del pasado jueves durante la votación de los artículos enmendados de propuesta de modificación de la ley que regula el TVCP. Los representantes de PNV, PSE y PP+C’s votaron en un principio en contra por error y Tejeria permitió que volviesen a hacerlo, esta vez de manera correcta y a favor del texto. Bildu remitió un escrito pidiendo la anulación de la votación al considerar que lo ocurrido era “muy grave” y que la postura de la presidenta fue “totalmente inaceptable por romper la imparcialidad de su cargo”.
En el informe de los servicios jurídicos se recoge que a la presidenta le corresponde dirigir y ordenar el desarrollo de los debates y que sus decisiones deben dirigirse a “preservar el derecho de participación de los parlamentarios”. Los letrados señalan que el reglamento de la Cámara no prevé la anulación y la repetición de las votaciones en las que el resultado no responda a la voluntad del pleno, pero precisan que tampoco existe ningún precepto que impida su repetición, que queda a criterio de la Presidencia. Así, respaldan la decisión de Tejeria en este caso, al tiempo que subrayan que la votación errónea “fue puramente ritual”, ya que “no existía ningún artículo del dictamen afectado por las enmiendas mantenidas, por lo que la repetición no generaba ninguna incongruencia”. Por el contrario, estiman que de no haberse repetido “podría haber supuesto una alteración radical de la posición efectivamente expuesta en el debate por los grupos parlamentarios”. Bildu mostró su disconformidad.