- El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció ayer que está ultimando un cambio en la ley para incorporar un "nuevo régimen sancionador" que permita acabar con los actos de homenaje que se brindan a presos de ETA, algo que definió como "incompatible con la dignidad de las víctimas". En respuesta a una pregunta de UPN en la sesión de control al Gobierno en el pleno del Senado, avanzó que están trabajando con asociaciones y fundaciones para instaurar este régimen sancionador mediante una reforma de la ley 29/2011 de Reconocimiento y Protección Integral a las Víctimas del Terrorismo.
Dicha reforma, aseguró el ministro tras ser criticado por "blanquear" el pasado de ETA y demorarse en este cambio legislativo, buscará "fortalecer el reconocimiento y dignidad de las víctimas", así como "mejorar sus derechos e incorporar un nuevo título". El ministro explicó que este cambio, "que no hicieron otros Gobiernos" apoyados por UPN con anterioridad al presidido por Pedro Sánchez, tendrá la "finalidad de regular un régimen sancionador que sirva como instrumento para terminar con actos de homenajes incompatibles con la dignidad que merecen las víctimas". Grande-Marlaska recordó que diferentes fallos judiciales han limitado las actuaciones por la vía penal contra actos de enaltecimiento y humillación a las víctimas, de ahí que defienda la "vía administrativa como un mecanismo adecuado para luchar contra esta conducta". En una dura intervención, el senador de UPN Alberto Catalán Higueras apremió a Grande-Marlaska al considerar que ha tenido "tiempo suficiente" para acometer este cambio legislativo, reprochándole que las "únicas prisas conocidas" del ministro han sido para aprobar los acercamientos de presos de ETA, sin arrepentimiento real y sin exigir la colaboración con la Justicia en los más de 300 casos sin resolver. El senador ligó esta forma de proceder a la estrategia que persigue, en su opinión, "satisfacer a Bildu", recordando el apoyo de este partido a los presupuestos del Estado de este año. "Es usted la mano ejecutora; quién le ha visto y quién le ve, señor ministro", reprochó Catalán. "Estoy en la defensa de la ley. En el pasado luché contra el terrorismo y sigo luchando contra el terrorismo", le respondió el ministro.