- Una vez fijada la fecha de las elecciones en la CAV el 12 de julio, queda por determinar cómo se adaptarán a la situación de excepcionalidad generada por la pandemia del coronavirus. Una de las principales incógnitas es la duración de la campaña electoral, si se mantiene en los habituales 15 días o si se reduce a una semana, tal y como sucedió con las últimas elecciones generales, aunque entonces fue como consecuencia de la investidura fallida y gracias a una reciente modificación legislativa. La decisión "corresponde a los partidos", afirmó el lunes el lehendakari, Iñigo Urkullu, ya que los 15 días están fijados por ley. Y a tenor de las opiniones vertidas ayer, las posturas están divididas.
El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, instó ayer a las formaciones a tomar la decisión en base al sentir de la sociedad. Llamó por ello a pensar "en el bien de la ciudadanía y en el coste de recursos y el ahorro que puede suponer" la reducción de la campaña, cuyo arranque está fijado el 26 de junio. En Radio Euskadi, criticó además que quienes "más se alarman ante la hipótesis de que las garantías sanitarias no estén absolutamente garantizadas para las elecciones", son los más favorables a mantener la campaña como tal.
Los partidos que forman el Gobierno Vasco de coalición, PNV y PSE, coinciden en abogar por una reducción de los días de contienda electoral. El presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, tachó a la oposición de "contradictoria" por pasar de criticar la celebración de los comicios en julio a "lanzarse a una campaña desaforada" frente a las "tímidas propuestas de amoldar la campaña a la situación". Señaló en concreto a EH Bildu y PP por su "indisimulado interés por hacer una campaña lo más clásica y lo más bronca posible" y se mostró también abierto a "pactar el tipo de actos para no poner a la gente en circulación".
Desde las filas del PSE, su coordinador de campaña, Miguel Ángel Morales, defendió en un comunicado que "la duración de la campaña se acorte para minimizar cualquier riesgo y adecuarnos a las restricciones que pudieran estar vigentes en otros ámbitos, tanto en el laboral como del ocio". El delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso, apeló en Onda Cero "a la conciencia" de los partidos para hacer la campaña "lo más garantista y segura posible", toda vez que será "atípica" por las limitaciones de distancias y protocolos de seguridad e higiene. El mismo lunes, Equo Berdeak reclamó reducir la campaña a la mitad.
En el caso de que los partidos alcancen un acuerdo para acortar la campaña, dicha decisión no sería vinculante, con el riesgo de que se produzca algún desmarque. Entre los contrarios a reducirla, la candidata a lehendakari de Elkarrekin Podemos-EB, Miren Gorrotxategi, opinó que sería "hacer una burla a la democracia", mientras el candidato de PP+C's, Carlos Iturgaiz, instó a "no hurtar el debate al electorado sobre la nefasta gestión del PNV". Arnaldo Otegi (EH Bildu) se limitó a expresar su impresión de que "la campaña comenzó hace tiempo, ya estamos en campaña".
"EH Bildu y PP quieren hacer una campaña lo más clásica y lo más bronca posible"
Presidente del EBB
"Recortar la campaña sería hacer una burla a la democracia, no es una buena idea"
Candidata de Elkarrekin Podemos-EB