madrid- La jueza de la Audiencia Nacional María Tardón dejó ayer en libertad a David Pla, último jefe político de ETA, con la prohibición de salir del Estado español y comparecencias semanales en el juzgado, tal y como había solicitado la Fiscalía en su comparecencia en la causa por la que había sido entregado la víspera por Francia. Según informaron fuentes jurídicas, la magistrada adoptó esta decisión después de que la Fiscalía planteara la posibilidad de que su procesamiento en la causa de Halboka, el frente jurídico de ETA, por un delito de integración en organización terrorista, sea cosa juzgada al haber cumplido ya en Francia una pena por un delito análogo.
Tardón no tuvo en cuenta las alegaciones de la acusación que ejerce la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) en esta causa, que considera que se trata de hechos diferentes en el tiempo, ni tampoco la petición de la defensa de que no se le prohibiera salir del Estado ya que tiene una hija de 4 años escolarizada en Iparralde.
El auto señala que en este caso “a la vista de las alegaciones de las partes, no cabe sino entender que, aun cuando ha aportado documentación justificativa del cumplimiento de las medidas acordadas por las autoridades judiciales francesas, es lo cierto que por este juzgado hubo de acudirse a la emisión de una orden europea de detención y entrega”.
No obstante, la juez entiende que la prisión provisional “no resulta proporcionada a tales circunstancias”, por lo que opta por “otras medidas cautelares que garanticen que no eludirá la acción de la justicia en la presente causa” y que son las mismas que pidió que la Fiscalía.