barcelona - El presidente del Parlament, Roger Torrent, defendió ayer el acercamiento de los presos de ETA a centros próximos a sus lugares de origen y a las residencias de sus familias: “La reconciliación necesita justicia y no venganza”. Así se pronunció en la presentación en la Cámara catalana de la Declaración de la Junta de Portavoces de “defensa de la paz” en Euskadi, promovida por el Foro Social Permanente para impulsar el proceso de paz y que encabezaron Torrent y la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria, aunque ésta no intervino en el acto. “Mantener alejados a los presos solo puede entenderse como medida de venganza que castiga” a los condenados y a sus familias, señaló Torrent tras la presentación de la declaración de la Junta de Portavoces, que fue acordada el 14 de enero y fue suscrita por JxCat, ERC, PSC-Units, los comunes y la CUP.
Torrent recordó que la violencia de ETA llegó a Catalunya también con atentados como el de Hipercor y el cuartel de Vic y el asesinato del exministro Ernest Lluch -su hija y miembro de los comunes, Rosa Lluch, asistió al acto-, y afirmó que no siempre se ha ayudado a las víctimas lo suficiente y sin distinciones y que los causantes del dolor de las víctimas deben reconocer que lo provocaron.
Cree Torrent que lo deben admitir haciendo un esfuerzo como el que hacen las víctimas al contener su rabia para “romper el ciclo de la violencia”, y subrayó que la política debe ayudar, sobre todo en ámbitos como la política penitenciaria, y entender que las divergencias no desaparecerán pero que se deben canalizar a través de la política, y no de la violencia. - E.P.