BILBAO - El PP volvió a retomar ayer una táctica a la que ha recurrido en numerosas ocasiones cuando ha gobernado el PSOE: agitar a las víctimas de ETA para criticar la labor de los socialistas, a quienes acusa de pactar con EH Bildu y desatender la memoria de los damnificados por el terrorismo. Así, la nueva portavoz de los populares en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, denunció ayer las maniobras destinadas a “blanquear, legitimar o hacer pasar por interlocutores políticos normales” a quienes no condenan la violencia, y abogó por actuar con contundencia contra los ongietorris.

Álvarez de Toledo, quien desde su regreso a la primera línea del PP ha mantenido una actitud extremadamente dura con los socialistas por, entre otras cosas, alcanzar el pacto de Gobierno en Navarra que requirió de la abstención de EH Bildu, se reunió ayer con la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Maite Araluce, para consensuar una serie de medidas destinadas a la defensa de “la memoria de los asesinados” por ETA. Tras dicho encuentro, la dirigente popular insistió en que la coalición que lidera Arnaldo Otegi “no es un interlocutor demócrata más”, por lo que debe aplicársele un cordón sanitario. “Bildu está fuera de un consenso moral que no es de izquierdas ni liberal ni conservador, pues es un grupo político que defiende que el asesinato estuvo en otra época justificado como forma de hacer política, y eso le excluye de cualquier debate político normal”, argumentó.

Sin embargo, la portavoz parlamentaria del PP evitó reclamar explícitamente la ilegalización de EH Bildu -formación que cumple con todos los requerimientos de la Ley de Partidos- pero sí recordó que la AVT está trabajando en ello, en relación a un informe presentado por la asociación de víctimas que recoge “indicios” que podrían llevar a la prohibición de la coalición soberanista. Por su parte, Maite Araluce criticó que Pedro Sánchez todavía no les haya recibido en sus 14 meses al frente del Ejecutivo español.

“sanciones que duelan” Asimismo, Cayetana Álvarez de Toledo se explayó en el tema de los ongietorris, actos que cree que deben ser sancionados con “mucho dinero” y de manera contundente, con multas a los consistorios o particulares que convoquen y organicen homenajes a presos de ETA tras salir de prisión. “Sanciones que duelan”, dijo en referencia a la cuantía que deben tener las multas, si bien eludió dar cifras concretas porque debería depender del “tamaño” del municipio.

La dirigente del PP recordó además que en los próximos cinco años saldrán de prisión “83 asesinos de ETA”, por lo que teme que se reproduzcan estos actos de homenaje y promete que trabajarán para prohibirlos. En ese sentido, recordó que ya en julio su partido registró una proposición de ley para impedir que se celebren. Igualmente, Álvarez de Toledo reclamó a los delegados del Gobierno en la CAV y Navarra que actúen con “diligencia y contundencia” contra los ongietorris. Finalmente, propuso que haya un “censo de asesinados” por la organización armada de acceso público que incluya también los hechos y las sentencias.