GASTEIZ - Casi cien mil personas han votado ya por correo en Euskadi, en concreto 96.830. La coincidencia de la campaña con la Semana Santa ha obligado a la Junta Electoral a ampliar el plazo hasta las 14.00 horas de hoy debido a la acumulación de electores en las oficinas de Correos, que solo el miércoles atendieron 600.000 visitas. En las oficinas de Bilbao el día con mayor movimiento fue el martes, según Roberto Asensio, jefe de la Red Oficinas Zona Norte de Correos. “Fue el peor ya que fue el primer día laboral desde el Jueves Santo. Son muchos días seguidos de fiesta, la gente vuelve de las vacaciones y es normal. Pero ahora la oficina está bastante tranquila”, afirmó ayer. Asensio confirmó que esta campaña está siendo especialmente ajetreada aunque el servicio postal ha multiplicado sus recursos para que “nadie” se quede sin votar. “Hemos tenido días de gran afluencia pero hemos hecho todo lo que ha estado en nuestra mano: hemos reforzado las ventanillas, hemos cubierto todos los puestos de atención, hemos puesto dispositivos móviles porque a veces no llegamos con el servicio de ventanilla y hemos ampliado los horarios de apertura”, señaló a este medio este responsable de Correos.
Desde que el pasado 5 de marzo se abriese el plazo para solicitar el voto por correo, todas las oficinas abren media hora antes y cierran media hora después del horario habitual. Además, 13 oficinas permanecieron ayer abiertas hasta las doce de la noche en Euskadi, siete ellas en Gasteiz, dos en Bilbao y el resto en Gipuzkoa. En Álava se ha disparado el voto por correo hasta el 13% del censo electoral porque el domingo coincide con San Prudencio, una de las fiestas grandes del Territorio. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), hasta ayer habían ejercido su derecho a voto 14.295 personas en Álava, 27.536 en Gipuzkoa y 55.000 en Bizkaia.
La oficina central de Correos de Bilbao -situada en Alameda Urquijo- estaba bastante relajada a media tarde. Entre el trasiego de paquetes y cartas certificadas, la gente que iba a votar, con su sobre y su papeleta, pasaba bastante desapercibida. Nada que ver con las largas colas que se han registrado en Madrid o la Comunidad Valenciana. Una de esas personas es Esperanza, una mujer gallega que pasa los inviernos con su hija en Bilbao y que pese a tener 82 años sigue ejerciendo su derecho a voto como el primer día. “Por correo o en la urna, lo importante es que el que salga sea capaz de gobernar bien porque falta nos hace”, dice. Su hija Josefina votará el domingo en su colegio electoral, “así salgo a tomar el vermut al mediodía”. Madre e hija se van confiadas en que el domingo el voto de Esperanza llegará a la mesa electoral asignada en su localidad natal de Viana do Bolo (Ourense). Y es que, según explica Asensio, Correos forma parte de un “muy garantista” ya que lo que está en juego es un derecho fundamental. Una persona, un voto; en la urna el día del sufragio o antes por correo.