madrid - Como ya se venía gestando en los últimos días, la dirección de Podemos suaviza su discurso y no descarta ahora la confluencia con Más Madrid, a pesar del “duro golpe” que ha supuesto para la formación morada la decisión de Íñigo Errejón de concurrir con la plataforma de Manuela Carmena. Así lo dijo ayer la portavoz parlamentaria, Irene Montero, que admitió que será necesario “reconstruir puentes” y “cerrar heridas” por responsabilidad, y para lograr el objetivo de alcanzar la unidad en la Comunidad madrileña y evitar que gobierne la derecha. “Vamos a estar ahí a pesar de que mucha militancia se haya sentido dolida y ofendida, es nuestra responsabilidad y la pido para todo el mundo”, afirmó.

Montero habló de “golpes” y “heridas”, las que a su juicio ha provocado en el partido la decisión de su antiguo número dos, y habló de “reponerse” para volver a poner el foco en el mensaje político. “Hay heridas que duelen pero, una vez repuestos, tenemos la responsabilidad de hacer política”. Así, la diputada de Podemos ha pasado de acusar a Íñigo Errejón de haber roto todos los puentes de diálogo, a reabrir la opción de una negociación con Más Madrid. Eso sí, como primer requisito para no alimentar el conflicto, puso a Errejón la condición de que no acusa a la reunión del Consejo Ciudadano Estatal de mañana, un encuentro extraordinario convocado tras conocerse la dimisión de Ramón Espinar la pasada semana. “Creo rotundamente que no debe acudir, creo que debe ser consecuente. Él se ha ido de Podemos, ha fundado otro partido y creo que nos debe dejar debatir, ser responsable, igual que lo vamos a ser nosotros”, argumentó.

Irene Montero reclamó asimismo al todavía secretario de Análisis Estratégico que “respete” y deje de “hacer daño” a Podemos si de verdad quiere posibilitar conversaciones para una lista unitaria. “Creo que la condición de posibilidad para que con el nuevo partido de Errejón nos podamos entender es que nos permita tener nuestros debates de forma tranquila”, defendió. En todo caso, la portavoz del partido morado aclaró que el diálogo con Errejón, de tener lugar, se producirá después de que Podemos cierre “sus programas y sus equipos”.

Por otra parte, la dirección nacional de Podemos ha optado por establecer una gestora en la Comunidad de Madrid para pivotar la federación tras la salida de su secretario general, Ramón Espinar. A la espera de que se convoquen primarias para renovar la Ejecutiva madrileña, estará al frente un equipo que incluye, ente otros, al exJemad Julio Rodríguez y a las diputadas regionales María Espinosa y Elena Sevillano. De este modo, el equipo técnico estará conformado en su totalidad por miembros afines a las tesis oficialistas, y casi todos ellos ya formaban parte del entorno más cercano a Espinar.

Una de las federaciones en valorar positivamente el giro discursivo de Montero fue la vasca. Según el secretario de Comunicación de Podemos Euskadi, Andeka Larrea, ven “con buenos ojos” un acuerdo con Errejón para lograr una lista única. En ese sentido, reclamó a la dirección nacional que “explore todas las vías posibles para que el espacio del cambio en la Comunidad de Madrid tenga una candidatura que genere ilusión”.