madrid - La decisión de Iñigo Errejón de concurrir en la lista de Manuela Carmena ha desatado un cisma en las direcciones nacional y madrileña de Podemos, que ahora valoran si presentar o no un candidato propio bajo la marca Unidos Podemos. La línea oficial es que estarán presentes en los comicios autonómicos de mayo pero, según reconocen fuentes del partido en Madrid, a día de hoy se debate sobre la conveniencia de competir o no contra Errejón. Mientras tanto, Izquierda Unida, principal socio de la formación morada en las confluencias, se abre a negociar con Más Madrid para que haya una sola papeleta de la izquierda el 26-M.

En la dirección de Podemos afirman que intentarán acordar con IU un candidato que encabece una lista de confluencia entre ambas formaciones, posiblemente un independiente. Sin embargo, existe preocupación por competir en Madrid contra Errejón, un cabeza de lista con tirón electoral y con gran nivel de conocimiento en la ciudadanía. Además, a los de Pablo Iglesias se les presenta el inconveniente de encontrar a estas alturas una persona de garantías que pueda hacer frente en las urnas al antiguo número dos del partido.

Por ello, en la formación morada hay debate sobre la posibilidad de renunciar a competir con Más Madrid en la Comunidad, tal y como han decidido hacer en las municipales para no perjudicar a Manuela Carmena. La posibilidad de una negociación con los afines a Iñigo Errejón tampoco está del todo enterrada; dicha opción fue defendida abiertamente ayer por IU. La sustituta de Errejón en el Congreso, Sol Sánchez, aseguró que su partido está dispuesto a negociar para “recomponer” la izquierda madrileña y lograr una lista unitaria. “Todas las vías están abiertas, es evidente que hay que hablar con todos los actores y ver cómo se recompone este escenario de la izquierda”, defendió.