BILBAO. Uno de los portavoces del colectivo, Tomás Campos, ha criticado la postura del Gobierno vasco respecto a sus reivindicaciones, y ha afirmado que las propuestas que los pensionistas han presentado a la Comunidad Autónoma "han sido rechazadas sin justificación".
A pesar de ello, Campos ha aclarado que el Ejecutivo vasco "tiene competencias legales" y que sería económicamente viable mantener unas pensiones mínimas de 1.080 euros, puesto que este año Euskadi ha tenido una recaudación de más de 700 millones de euros por encima de lo previsto.
También ha criticado la "falta de sensibilidad" de los dirigentes con respecto a las personas con pensiones de "miseria" o a otros sectores de la ciudadanía en situaciones "similares o peores", y ha afirmado que no respetan su propia ley, que reconoce que la RGI se debe corresponder con la cuantía del salario mínimo.
Los sindicatos vascos ELA y LAB también han llamado a la población a sumarse a la manifestación de mañana, que consideran "imprescindible" para poder mejorar las pensiones.
ELA ha afirmado, mediante una nota, que "la prioridad" debe ser crear un sistema público de pensiones, y ha aclarado que los sistemas complementarios o privados no son alternativas válidas; el sindicato también ha exigido que "se dé marcha atrás" en los recortes sobre las pensiones aprobados en las últimas décadas.
El sindicato abertzale LAB, en otra nota, ha criticado que son las mujeres pensionistas el colectivo que "más sufre" la precariedad, y ha recordado que el 76 % de las mismas cobra por debajo del umbral de la pobreza.
