madrid - No hay respiro para la Universidad Rey Juan Carlos (URJC). Un día tras otro se ve salpicada por informaciones que ponen en entredicho su imagen y ayer tuvo ración doble. A las revelaciones conocidas ayer sobre el director del Instituto de Derecho Público (IDP) de la universidad Enrique Álvarez Conde y su uso de tarjetas oficiales para desviar dinero a sus familiares, se le añadió a última hora de la noche la información del periódico digital eldiario.es y de la cadena SER que sostienen que un juzgado de Madrid investiga más de medio millar de títulos de Derecho otorgados de forma irregular a otros tantos ciudadanos italianos.
El diario digital y la cadena radiofónica hacen referencia a fuentes de la investigación que sostienen que los abogados de Italia habrían acudido a la universidad madrileña con el objetivo último de colegiarse en España, concretamente en el Colegio de Abogados de Madrid, ante las enormes dificultades que supone hacerlo en su país. El título otorgado por esta universidad les exhimía de cursar el máster en Ciencias Jurídicas que se exige en Italia para ejercer y que ronda los 18.000 euros, frente a la mitad de esa suma que costaría esa titulación en el país transalpino.
Nuevamente aparece en escena el ya disuelto Instituto de Derecho Público de la Universidad Rey Juan Carlos tras estas titulaciones irregulares. El centro estaba dirigido por Álvarez Conde, principal imputado del caso Cifuentes y de la pieza separada que investiga el curso del presidente del PP, Pablo Casado.
A instancias del juzgado de instrucción número 40 de Madrid, la Brigada Provincial de Extranjería de la capital española solicitó el pasado mes de junio información a la universidad sobre colegiaciones masivas en España de abogados italianos, siempre según la información publicada por eldiario.es.
La policía ha detectado posibles falsedades documentales en las titulaciones de estos italianos que se han colegiado en distintos colegios de abogados de España incumpliendo los requisitos legales.
La investigación arrancó a comienzos de este año, antes de que estallara el caso Cifuentes y tuvo su origen en la solicitud masiva de documentos de identidad para extranjeros por parte de un representante legal de nacionalidad marroquí ante la Policía. La Brigada Provincial de Extranjería siguió la pista a este ciudadano marroquí y a otras personas que también pidieron los NIE en el consulado español en Italia. El NIE es un número asignado por las autoridades españolas para poder identificar a los extranjeros que deban realizar actos jurídicos concretos en el Estado español.
Posteriormente, la Policía comprobó que también el Colegio de Abogados de Madrid había procedido a inscribir a numerosos ciudadanos italianos con la simple presentación de documentos por vía telemática. Con el máster y la colegiación, los ciudadanos italianos ya podían ejercer en toda Europa, incluido su país, donde hay un cupo de letrados ejercientes que no puede ser rebasado. De ahí, la dificultad para acceder a la carrera en Italia. También despertó sospechas que el medio millar de licenciados en Derecho italianos realizará viajes a España para supuestos exámenes en la Universidad Rey Juan Carlos sin tener apenas conocimientos de español. Se trataba, según eldiario.es, de viajes fugaces en los que algunos hicieron coincidir partidos de fútbol del Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu, correspondientes a la Liga de Campeones.
En 2016 ya se presentó una denuncia ante la Fiscalía de Madrid sobre un fraude en la homologación de licenciaturas en Derecho a 500 italianos. Ahora, dos años después, un juzgado y la policía han reabierto la investigación de estas convalidaciones y colegiaciones. - DNA
“Excursión”. En mayo de 2016, 500 italianos se desplazaron en ocho autobuses desde Atocha hasta la Universidad Rey Juan Carlos “como si fueran de excursión” para hacer un examen y lograr el título en Derecho, según una denuncia ante la Fiscalía.
Licenciados. Con el máster y la colegiación obtenidos en la Rey Juan Carlos, los ciudadanos italianos ya podían ejercer en toda Europa, incluido su país, donde existe un límite de letrados ejercientes que no puede ser superado. De ahí la dificultad para acceder a la carrera en Italia.