barcelona - El PNV tuvo ayer una presencia destacada en la celebración de la Diada catalana para mostrar su solidaridad con los presos soberanistas y reclamar a la justicia española que no caiga en la tentación de imponerles una condena ejemplarizante, porque esa decisión únicamente provocaría más sufrimiento y tensión. El presidente de la ejecutiva jeltzale, Andoni Ortuzar, fue muy crítico con la mano dura que impuso el expresidente Rajoy para reprimir el conflicto catalán, y cree que el encarcelamiento de los exconsellers y los líderes sociales del independentismo por el referéndum del 1 de octubre es injusto. Espera su absolución. No obstante, no comparte que su puesta en libertad deba ser una condición previa para dialogar con el presidente Sánchez. Ortuzar defendió ayer que el diálogo debe producirse en cualquier caso. En ese sentido, recomendó a los catalanes que se sienten a negociar sin colocar esa condición previa.

Los jeltzales asumen que nada podrá evitar que arranque el juicio contra el procés en el Tribunal Supremo aunque sea injusto, porque el Gobierno español de Pedro Sánchez ha defendido hasta la saciedad que en el Estado español existe la división de poderes y que no puede influir en las decisiones judiciales ni pedir una rebaja en la condena que elimine el delito de rebelión. Esas palabras atan ahora a Sánchez y limitan su radio de acción para evitar el juicio, que podría arrancar antes de que acabe este año. No obstante, Ortuzar, sí pidió a la justicia española que no imponga una pena basada en prejuicios. Al mismo tiempo, recomendó a los partidos soberanistas que dialoguen con Madrid aunque este juicio esté sobrevolando en el horizonte. Algunos portavoces de ERC han exigido como condición previa al diálogo la libertad de los presos y, en ese contexto, Ortuzar aconsejó a los catalanes que no pongan requisitos y abran conversaciones a pesar del juicio. Al Estado le pidió que ofrezca soluciones políticas, porque la vía judicial, la suspensión del autogobierno con el artículo 155 y el encarcelamiento de los exconsellers no han conducido a nada.

Ortuzar y el burukide Joseba Aurrekoetxea participaron en la tradicional ofrenda floral en el monumento a Casanova y, ya por la tarde, se desplazaron a la cárcel de Lledoners para reunirse con los presos del PDeCAT Jordi Turull, Josep Rull y Joaquim Forn. El PNV insiste en vincular esta visita a cuestiones de amistad y del ámbito personal, pero el trasfondo político es indudable. Esta cita contribuye a reforzar las relaciones con el PDeCAT después del malentendido entre el lehendakari y el president Torra, que había interpretado que Urkullu solo había pedido la libertad del líder de ERC, Oriol Junqueras.

Ortuzar participó por la mañana en la ofrenda floral acompañado por el líder del PDeCAT, David Bonvehí, y el expresident Artur Mas. Fue a preguntas de los periodistas cuando entró a valorar si la puesta en libertad de los presos debe ser una condición previa para el diálogo: “Para el diálogo no hay que poner condiciones nunca, hay que dialogar siempre, incluso en las peores condiciones. Precisamente cuando peores son las situaciones es cuando más se necesita el diálogo. Nosotros en Euskadi tenemos experiencia de vivir situaciones complejas, y el diálogo ha sido el que nos ha permitido salir de ellas. Así que nosotros, desde la modestia, a las autoridades catalanas y a los partidos soberanistas catalanes les recomendamos que dialoguen, que se sienten a dialogar. Con sus postulados, sin renunciar a nada, porque nadie puede pedir que se renuncie a las ideas políticas, pero para dialogar siempre hay ocasión”.

hacer política Además, aseguró que la solución no va a venir de la “represión ni la judicialización”, y pidió al tribunal español un juicio “justo, sin prejuicios”. “Lo que venimos a demandar es política. Política con mayúsculas para buscar una solución a la cuestión catalana, porque del diálogo y de la política podemos esperar algo, pero de sentencias ejemplarizantes lo único que se puede esperar es que esto se prolongue y solo traiga más sufrimiento. Queremos que la sociedad catalana pueda desarrollarse en plenitud y ser feliz”, defendió.

El PNV quiso reservarse el contenido de su reunión con los exconsellers en Lledoners. Solo publicó una foto en puertas de la cárcel y un tuit donde Ortuzar los vio “serenos, fuertes y muy atentos a la política catalana”.