gasteiz - El lehendakari, Iñigo Urkullu, reclamó ayer “altura de miras” para solucionar la situación generada en Catalunya y reclamó a los gobiernos español y catalán diálogo político y distensión para desandar la escalada dialéctica entre ambas partes que ha subido muchos decibelios en los últimos días con cruces de declaraciones entre Moncloa y el Palau. En ese sentido volvió a reclamar la liberación de los presos soberanistas catalanes encarcelados por su responsabilidad en el procés y en el referéndum del 1-O.
Urkullu rescató las realizadas la semana pasada por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en las que advirtió al president de la Generalitat, Quim Torra, de que una vuelta a la unilateralidad o un intento de ruptura con el Estado le obligaría a aplicar de nuevo el artículo 155. El lehendakari recordó a Sánchez que “es presidente también porque hay un cambio en el planteamiento de lo que fue la disposición a la aplicación del artículo 155 a una necesidad de orientar la política para con Catalunya de otra manera diferente”.
En declaraciones a Radio Euskadi, Urkullu consideró que el proceso judicial que se ha planteado contra los políticos catalanes está “revestido de una acusación de rebelión” que cree que no existe. “Sería bueno que los presos estuvieran en la calle para que pudieran expresarse en base al contexto que se quiere construir”, argumentó.
Sobre la visita a la cárcel de Estremera que realizó el pasado mes al exvicepresidente de la Generalitat catalana Oriol Junqueras y a la posterior conversación telefónica mantenida con el president Torra, tras el “malestar” de JxCat por unas declaraciones del lehendakari sobre la situación en Catalunya, Urkullu rechazó que desde la Generalitat se le haya transmitido malestar alguno por su visita a Junqueras y valoró la conversación telefónica mantenida con el president tras unas “declaraciones que hice y que fueron mal utilizadas”.
A este respecto precisó que ya ha hablado con Torra “para aclarar estas cuestiones sin que mediara reproche alguno, lo que sirvió para seguir planteando la disposición al diálogo”. Reiteró además que la visita en prisión a Junqueras fue a petición de éste y “de otras personas que me lo plantearon”.
Cuestionado por si se le ha solicitado que actúe de mediador en Catalunya, Urkullu advirtió de que nunca desvela “las conversaciones ni el planteamiento” sobre lo que él hable con otros agentes. “Yo atiendo a lo que me piden con el propósito de intentar ayudar. Hablamos de cuestiones que son de Estado, no solo de Catalunya. Como hombre político con responsabilidad institucional todos deberíamos tener altura de miras con sentido de lo que es política de estado”, defendió. Para disipar dudas, mostró su intención de “no interferir en los problemas de Catalunya, salvo que se me solicite”.
diálogo político A su juicio, lo que se aborda es una cuestión política como es la “causa nacional catalana o nacional vasca que refleja un problema político que exige la necesidad de un diálogo político con voluntad de acuerdo”. Por ello reclamó elementos de distensión “y eso no lo veo todavía hoy por hoy”.
Las manifestaciones del lehendakari se producen la víspera de la conferencia hoy de Torra en la que se espera que haga un alegato independentista para Catalunya y una advertencia a Sánchez de que el diálogo que pretende no se circunscriba solo al autogobierno sino también al referéndum de independencia. - H. U.