barcelona - El Plan Operativo Minerva de los Mossos d’Esquadra para proteger edificios oficiales, sedes de partidos políticos y asociaciones y afrontar actos multitudinarios se puso ayer en marcha hasta el 22 de mayo y estará dirigido directamente por el comisario jefe Ferran López y por un gabinete de coordinación integrado por los máximos mandos del cuerpo.
En este plan se explica que los objetivos principales son garantizar la seguridad ciudadana y el desarrollo normal de la convivencia, incrementar y extremar las medidas de prevención y reacción para asegurar la actividad ordinaria en Catalunya; y se implementa ante el actual clima político y social y las acciones de los Comités de Defensa de la República (CDR), después de que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena haya dictado los autos de procesamiento por el 1-O contra políticos independentistas.
Los Mossos admiten que se pueden seguir produciendo movilizaciones y protestas en las próximas semanas que pueden suponer una importante afectación en la actividad cotidiana de la sociedad catalana, y no descartan poder ampliar su duración. Así, este plan se anticipa a posibles movilizaciones y acciones de los CDR en jornadas con presencia masiva de personas como el 23 de abril. Sant Jordi, y el 1 de mayo, y en función del posible desarrollo de la situación política y judicial en Catalunya. - E. P.